Jacques-Davy Duperron
De Enciclopedia Católica
Teólogo y diplomático; nació el 25 de noviembre de 1556 en St-Lô (Normandía), Francia; murió el 5 de septiembre de 1618, en Batignolles, un suburbio de París. Sus padres eran calvinistas y podo después de su nacimiento buscaron refugio en Suiza debido a la persecución. Tras recibir una esmerada educación literaria, científica y filosófica, se dedicó al estudio de los Padres y escritores eclesiásticos, especialmente San Agustín y Santo Tomás de Aquino, y en 1577 ó 1578 se convirtió a la fe católica. Disfrutó del favor y la confianza del rey Enrique III, a quien había sido presentado en 1576, y luego de los de Enrique IV. La conversión de este último se debió en gran medida a las instrucciones e influencia de Duperron, y éste y el cardenal d’Ossat (1595) obtuvieron que el Papa lo absolviera de la herejía. Mientras estaba en Roma para ese fin, Duperron fue consagrado obispo de Evreux, una sede para la que el rey Enrique IV ya lo había nombrado en 1591, aunque aún no estaba en las órdenes sagradas. Inmediatamente después de su conversión Duperron comenzó a trabajar con incansable celo por la conversión de los protestantes. Por su ciencia, elocuencia y poder de argumentación ganó muchas victorias en controversias y conferencias con los ministros de las sectas reformadas. En 1600 se realizó la famosa conferencia de Fontainebleau con el líder del calvinismo francés, Duplessis-Mornay, quien había sido acusado por Duperron de mutilación, falsificación y la mala interpretación de los textos de los Padres en su obra sobre la Eucaristía. De los jueces, tres eran católicos y tres calvinistas. El 4 de mayo se examinaron nueve pasajes respecto a los cuales la comisión decidió en contra de Duplessis. La enfermedad real o fingida de este último y su salida impidieron nuevas reuniones.
Duperron fue creado cardenal en 1604. Ese mismo año se fue a Roma, y fue invitado a asistir a las reuniones de la Congregatio de Auxiliis que Clemente VIII había convocado para poner fin a las discusiones sobre la gracia y la libertad. Mientras tanto, tuvo un papel importante en la elección de León XI y Pablo V. La decisión de Pablo V de no condenar el sistema molinista se debió en gran parte a los consejos de Duperron. Duperron se convirtió en arzobispo de Sens en 1606. En 1611 detuvo la decisión del Parlamento que condenaba una de las obras de Belarmino, y defendió la tesis de este último de la infalibilidad del Papa y su superioridad sobre los concilios. En un sínodo celebrado en París (1612) condenó la obra "De ecclesiastic et politica potestate" de Edmond Richer, síndico de la Sorbona. En 1614-15, en la reunión de los Estados Generales en París, instó, en contra del Tercer Estado, la aceptación de los decretos del Concilio de Trento sobre la disciplina y la reforma. El conocimiento y la elocuencia de Duperron eran tan grandes que el Papa Pablo V dijo de él: "Oremos para que Dios inspire a Duperron, porque él nos convencerá de lo que quiera"
Sus obras fueron recopiladas en tres volúmenes (París, 1620 y 1622). El primer volumen contiene su "Traité du Sacrement de l'Eucarística", escrito contra Duplessis-Mornay. Sus tres libros tratan sobre
- (1) una comparación de la Eucaristía y los demás sacramentos de la nueva ley con los de la ley antigua,
- (2) la tradición de los Padres, a que se añade un estudio especial de la doctrina de San Agustín;
- (3) la práctica de la Iglesia sobre la adoración de la Eucaristía.
El segundo volumen es el "Replique a la Réponse du Roy de la Grande-Bretagne”. Jacobo I de Inglaterra reclamó que él pertenecía a la Iglesia Católica, puesto que el creía las verdades que los primeros cristianos consideraban necesarias. En su respuesta Duperron trata de las características de la Iglesia Católica, de algunos artículos que el rey no consideraba esenciales, la preservación e integridad de la doctrina y la disciplina de la Iglesia, la Eucaristía como Sacramento y sacrificio, la invocación de los santos, el uso del latín, la traducción de la Sagrada Escritura, etc.
El tercer volumen contiene varias obras entre las que destacan un tratado sobre la vocación, las Actas de la Conferencia de Fontainebleau, una refutación de la obra de Tileno sobre las tradiciones apostólicas, algunos tratados morales y espirituales, y poemas tanto cristianos como profanos. El secretario de Duperron, César de Ligny, escribió "Ambassades et négociations du cardinal Duperron" (París, 1618). Christophe du Puy publicó, bajo el título de "Perroniana", comentarios sobre temas teológicos, políticos y literarios a partir de las notas de su hermano, que había estado con Duperron durante mucho tiempo.
Bibliografía: FÉRET, Le cardinal Duperron (París, 1877); DE BURIGNY, Vie du cardinal Duperron (París, 1768); DUPIN, Nouvelle bibliothèque des auteurs ecclésiastiques (París, 1710), XVII, 25; RÄSS, Die Convertiten seit der Reformation (Friburgo, 1866), II, 226, 441, III, 384; Gallia christiana (2da. ed., París, 1870), XI, 612, XII, 96; SEIDL en Kirchenlexicon, IV, 26.
Fuente: Dubray, Charles. "Jacques-Davy Duperron." The Catholic Encyclopedia. Vol. 5. New York: Robert Appleton Company, 1909. <http://www.newadvent.org/cathen/05203a.htm>.
Traducido por Luz María Hernández Medina. rc