Jueves Santo
De Enciclopedia Católica
La fiesta del Jueves de Lavatorio o Jueves Santo conmemora solemnemente la institución de la Eucaristía y es la más antigua de las celebraciones peculiares a la Semana Santa. En Roma, al comienzo de esta conmemoración, se añadieron varias ceremonias accesorias, a saber, la consagración de los santos óleos y la reconciliación de los penitentes, ceremonias, obviamente, de carácter práctico y de fácil explicación por la proximidad de la Pascua cristiana y la necesidad de prepararse para ella. Jueves Santo no podía dejar de ser un día de reunión litúrgica, ya que, en el ciclo de fiestas movibles, gira en torno al aniversario de la institución de la liturgia. En ese día, mientras se completaba la preparación de los candidatos, la Iglesia celebraba la Missa chrismalis de la que ya hemos descrito el rito (véase santos óleos) y, por otra parte, procedía a la reconciliación de los penitentes.
En Roma todo se llevaba a cabo durante el día, mientras que en África la Eucaristía de Jueves Santo se celebraba después de la cena, con miras a una más exacta conformidad con las circunstancias de la Última Cena. El Canon 29 del Concilio de Cartago dispensa a los fieles del ayuno antes de la Comunión el Jueves Santo, porque en ese día existía la costumbre de tomar un baño, y el baño y el ayuno se consideraban incompatibles. San Agustín también habla de esta costumbre (Ep. CXVIII ad Januarium, n. 7); incluso dice que, como ciertas personas no ayunaban ese día, la ofrenda se hacía dos veces, mañana y tarde, y así los que no observaban el ayuno podían participar de la Eucaristía después de la comida de la mañana, mientras que los que ayunaban esperaban la comida de la noche.
Jueves Santo se celebraba con una sucesión de ceremonias de un carácter alegre: el bautismo de los neófitos, la reconciliación de los penitentes, la consagración de los santos óleos, el lavatorio de los pies y la conmemoración de la Santísima Eucaristía, y, debido a todas estas ceremonias, el día recibió diferentes nombres, todos los cuales aluden a una u otra de sus solemnidades.
- Se le llamó Redditio symboli porque, antes de ser admitidos al bautismo, los catecúmenos tenían que recitar el credo de memoria, ya fuese en presencia del obispo o de su representante.
- Pedilavium (lavatorio de los pies), rastros del cual se hallan en los ritos más antiguos, que ocurrían en varias iglesias el Jueves Santo, el capitilavium (lavado de la cabeza) que se había realizado el Domingo de Ramos (San Agustín (St. Augustine, "Ep. CXVIII, CXIX", e. 18).
- Exomologesis, y reconciliación de los penitentes: una carta del Papa San Inocencio I a Decencio de Gubbio, testifica que en Roma se acostumbraba “quinta feria Pascha” absolver a los penitentes de sus pecados mortales y veniales, excepto en casos de enfermedad grave que los mantuviese alejados de la iglesia (Labbe, "Concilia" II, col. 1247; San Ambrosio, "Ep. XXXIII ad Marcellinam"). Los penitentes participaban en la Missa pro reconciliatione paenitentium, y se les daba la absolución antes del ofertorio. El “Sacramentario” del Papa Gelasio contiene un Ordo agentibus publicam poenitentiam (Muratori, "Liturgia romana vetus", I, 548-551).
- Olei exorcizati confectio. En el siglo V se estableció la costumbre de consagrar el Jueves Santo todos los crismas necesarios para la unción de los recién bautizados. El "Comes Hieronymi", los sacramentarios gregoriano y gelasiano y el "Missa ambrosiana" de Pamelio, todos concuerdan sobre la confección del crisma en ese día, como también lo hace el "Ordo Romanus I".
- Anniversarium Eucharistiae. La celebración nocturna y la doble oblación pronto se convirtieron en el objeto de un desagrado cada vez mayor, hasta que en 692 el Concilio in Trullo promulgó una prohibición formal. La celebración eucarística se celebró entonces en la mañana, y el obispo reservaba parte de las especies sagradas para la comunión del día siguiente. Missa praesanctificatorum (Muratori, "Liturg. rom. Vetus", II, 993).
- Otras celebraciones: El Jueves Santo cesa el repique de campanas, se desviste el altar después de las vísperas y el Oficio nocturno se celebra bajo el nombre de “Tenebrae” (Oficio de Tinieblas).
Fuente: Leclercq, Henri. "Maundy Thursday." The Catholic Encyclopedia. Vol. 10. New York: Robert Appleton Company, 1911.
<http://www.newadvent.org/cathen/10068a.htm>.
Traducido por Luz María Hernández Medina. rc