Jonatán
De Enciclopedia Católica
(Hebreo, "Yahveh ha dado", cf. Theodore; Set. ’Ionáthan.)
Nombre de varias personas mencionadas en el Antiguo Testamento, entre las que deben mencionarse las siguientes:
(1) Jonatán, hijo de Guersón, hijo de Moisés, mencionado por su nombre en Jc. 18,30, y como un joven levita en el 17,7 ss. Había salido de Belén, su ciudad natal, llegó al Monte Efraín, donde fue inducido por un cierto Miká a permanecer como sacerdote de un ídolo. Este ídolo fue capturado después por los de Dan y llevado a Lais, a donde les acompañó Jonatán, y él y sus descendientes actuaron como sacerdotes del ídolo hasta el día de la cautividad.
(2) Jonatán (Vulg. Jonatás), el hijo mayor de Saúl y Ajinoam (1 Sam. 14,49-50). Aparece por primera vez participando con su padre en la batalla contra los filisteos, y era tal su valentía que Saúl le confió el comando de un millar de soldados en Guibeá. La derrota que infligió Jonatán a la guarnición de los filisteos en Guibeá, y su victoria posterior en los confines de la misma ciudad se narran en los cap. 13 y 14 de 1 Samuel. A través de una intervención considerada como milagrosa (14,15) ese combate dio lugar a una desbandada general de los filisteos, y Saúl en la emoción de la persecución proclamó un irreflexivo juramento, diciendo: "Maldito el hombre que coma algo antes del anochecer, antes que me haya vengado de mis enemigos.” (14,24) El curso de la huida los llevó a través de un bosque donde apareció miel silvestre en el suelo, pero el pueblo no la probó porque temían al juramento. Pero Jonatán, que no había oído el pronunciamiento de su padre, inocentemente probó la miel y, cuando se mandó a hacer un alto por la tarde y el sacerdote consultó a Yahveh sobre la persecución al enemigo, no recibieron ninguna respuesta. Saúl asumió de inmediato que algunos habían cometido pecado contra el Señor, y de nuevo juró temerariamente juró que, aunque la culpa se encontrase en su hijo Jonatán, seguramente moriría. La suerte indicó que Jonatán era el culpable, el cual confesó haber saboreado la miel, y se salvó sólo por la intervención del pueblo (1 Sam. 14,45). Cuando, después de su victoria sobre Goliat, el joven David apareció en la corte de Saúl, surgió la más profunda y leal amistad entre él y Jonatán, quien más de una vez fue instrumental en salvar a su amigo de la ira envidiosa de Salud (1 Sam. 18 ss.). Pero Saúl, pese a haberse ablandado varias veces, finalmente se volvió implacable, y Jonathan, viendo que sus esfuerzos eran inútiles, envió a su amigo afuera, a Nob, después de una renovación del pacto mutuo de amistad entre ellos y su posteridad (1 Sam. 20). Jonathan renunció alegremente a su derecho al trono de su padre a favor de su amigo, considerándose feliz de ser segundo después de él en el reino. Este pacto fue renovado después, cuando David, después del sitio de Queilá, se retiró al desierto de Zif (1 Sam. 23,15-18), pero Jonatán no estaba destinado a participar en el triunfo final de su amigo. En una batalla contra los filisteos en el monte Gelboé fue asesinado junto con sus dos hermanos, Abinadab y Malki Súa, y su padre Saúl. Sus cuerpos fueron enterrados piadosamente por los habitantes de Yabés de Galaad (1 Sam. 31).
(3) Jonatán, hijo del sumo sacerdote Abiatar y fiel servidor del rey David. Fue instrumental en salvar la vida del rey mediante la protección de la información relativa a los planes de David de sus enemigos.
(4) Jonatán (apodado Affús), hijo menor de Matatías y hermano de Judas Macabeo. Las hazañas patrióticas de esta familia de héroes judíos se narran en los dos Libros de los Macabeos y también en las obras de Josefo (Antiq., XIII). Después de la derrota y muerte de Judas (alrededor de 161 a.C.), Jonatán fue elegido líder de la banda de patriotas, que en ese momento estaba en apuros y se había visto obligada a retirarse más allá del Jordán. Pero la muerte del indigno sumo sacerdote Alcimo trajo consigo un cambio en la confianza del público, y el general invasor, Báquides, se retiró a Siria, dándole así a los judíos un respiro de dos años. Alentado por el partido de los helenistas o judíos apóstatas, sin embargo, hizo un nuevo intento de subyugar al país. Este intento fue frustrado por Jonatán, y el resultado de la breve campaña fue un tratado por el que éstos se mantuvieron prácticamente dueños de Judea. Este estado de cosas continuó durante seis años con un continuo aumento de poder e influencia por parte de los Macabeos, por lo Demetrio y Bales, los dos competidores por el trono sirio, solicitaron una alianza con su partido. Jonatán decidió a favor de Bales, el cual, después de vencer a su rival, le otorgó a Jonatán no sólo el título de sumo sacerdote, sino también el de Strategus de su país y el de gobernador de una parte del imperio sirio (1 Mac. 10,1-66). Después de muchas hazañas militares (1 Mac. 11,60-74) Jonatán envió embajadores a Roma para renovar el tratado hecho por Judas con el Senado romano, y también entró en una alianza con los espartanos (1 Mac. 12,1-23). Por un tiempo pareció como si estuviera destinado a restaurar su país a la independencia completa, pero Trifón, el aspirante al trono de Siria, reconoció en Jonatán su principal obstáculo y lo hizo prisionero por alta traición y puso fin a su carrera cuando lo arrojó en un calabozo (1 Mac. 12,24-54). El gobierno de Jonatán se extendió desde el 161 al 143 a.C.
Bibliografía: I. LESÊTRE en VIGOUROUX, Dict. de la Bible, s.v. Jonathan (1); II. LESÊTRE, ibid., s.v. Jonathas (1); III. BEURLIER, ibid., s.v. Jonathas (2); IV. BEURLIER, ibid., x. v. Jonathas (3). Vea también GIGOT, Outlines of Jewish History, xxviii, § 2, 2; HASTINGS, Dict. of the Bible, s.v.
Fuente: Driscoll, James F. "Jonathan." The Catholic Encyclopedia. Vol. 8. New York: Robert Appleton Company, 1910. <http://www.newadvent.org/cathen/08499b.htm>.
Traducido por Luz María Hernández Medina.