Sedulio Escoto
De Enciclopedia Católica
Sedulio Escoto fue un maestro, gramático y comentarista bíblico irlandés que vivió en el siglo IX. A veces se le llama Sedulio el Joven, para distinguirlo de Sedulio también, probablemente, un irlandés, el autor de "Carmen Paschale" y otros poemas sagrados. La forma irlandesa del nombre es Siadhal o Shiel. Sedulio el Joven floreció desde 840 hasta 860. Hay, en total, seis Siadhals mencionados en los "Anales de los Cuatro Maestros" entre los años 785 y 855. De estos, uno estuvo presente en un concilio en Roma en 721, y otro fue abad de Kildare y murió en 828. Sin embargo, el más conocido y el más importante no fue ninguno de estos, sino un Siadhal que durante el reinado del emperador Lotario (840-855) formó parte de una colonia de maestros irlandeses en Lieja.
Según los registros manuscritos del siglo IX, había un maestro en San Lamberto, Lieja, conocido como Sedulio Escoto, que era escriba y poeta. Era estudiante de griego y, según Montfaucon, fue él quien copió el salterio griego que ahora es el número 8047 en la "Bibliotheque de l'Arsenale", París. Sus poemas, hasta un total de noventa, fueron publicados por Traube en el "Poetæ Ævi Carolini", que es una parte de la "Monumenta Germaniæ Historica". Es muy probable que, hacia el final de sus días, se fuera a Milán, siguiendo el ejemplo de su compatriota Dungal, quien estableció una escuela en Pavía. Se desconocen la fecha y el lugar de su muerte.
Las obras más importantes de Sedulio son su tratado "De Rectoribus Christianis", un comentario sobre el "Isagoge" de Porfirio, o introducción a la lógica de Aristóteles, y un comentario bíblico "Collectanea in omnes beati Pauli Epistolas". El primero de ellos es una contribución notable a la ética cristiana. Aparentemente es el primero de una larga lista de tratados escritos durante la Edad Media para la instrucción de príncipes y gobernantes cristianos, una disertación sobre los deberes propios de ese estado de vida, un "Espejo para los príncipes", como tales obras llegaron a ser llamadas en un período posterior.
La obra de Sedulio muestra, entre otros rasgos notables, un profundo sentimiento moral, una comprensión del hecho de que la misión del Estado no es ni puramente económica por un lado ni exclusivamente eclesiástica por otro. De hecho, se había planteado la cuestión de las relaciones entre Iglesia y Estado, y Sedulio, no hace falta decirlo, no dudó en afirmar y defender los derechos de la Iglesia. No estuvo del lado de aquellos que, viendo en Carlomagno el ideal de un pontífice y gobernante en una sola persona, estaban a favor de la idea de que el príncipe debería ser de hecho supremo en materia religiosa. Por el contrario, estuvo a favor de una división de los poderes temporales y espirituales y requirió del príncipe una cuidadosa observancia de los derechos y privilegios de la Iglesia. La descripción de las cualificaciones de la Reina (págs. 34 ss. en la edición de Hellmann) no es sólo cristiana en sentimiento y tono, sino también humanista, en el mejor sentido de la palabra. El comentario sobre el "Isagoge" se conocía en el occidente de Europa sólo en la versión latina. No menos interesantes que los escritos de Sedulio son sus cartas, algunas de las cuales están publicadas en el "Neues Archiv", II, 188 y IV, 315. En ellas se narran las vicisitudes de los irlandeses exiliados en el Continente, y un e da una idea de la actitud hacia los exiliados por parte de las autoridades, civiles y eclesiásticas, así como por el pueblo.
Bibliografía: HELLMANN, Sedulius Scotus (Munich 1906); Cath. Univ. Bulletin (julio 1907 y abril 1898).
Fuente: Turner, William. "Sedulius Scotus." The Catholic Encyclopedia. Vol. 13, págs. 680-681. New York: Robert Appleton Company, 1912. 1 nov. 2020 <http://www.newadvent.org/cathen/13680b.htm>.
Traducido por Luz María Hernández Medina