San Juan Limosnero
De Enciclopedia Católica
(JOANNES ELEEMOSYNARIUS; JOANNES MISERICORS).
Patriarca de Alejandría (606-16), nació en Amato en Chipre alrededor del año 550; murió allí en el 616. Fue el hijo de un tal Epifanio, gobernador de Chipre, y era de noble ascendencia; siendo joven se casó y tuvo hijos, pero su esposa e hijos fallecieron pronto, a partir de lo cual él entró a la vida religiosa.
A la muerte del patriarca Teodoro, los alejandrinos le rogaron el emperador Focas que nombrara a Juan como su sucesor, lo cual fue hecho de conformidad. En su juventud Juan había tenido una visión de una bonita doncella con un ramo de olivos en su cabeza, la cual le dijo que ella era Compasión, la hija mayor del Gran Rey. Esto evidentemente dejó una gran impresión en la mente de Juan, y, ahora que tenía la oportunidad de ejercer la benevolencia en gran escala, pronto se hizo muy conocido en todo Oriente por su munficente liberalidad hacia los pobres. Uno de sus primeros pasos fue hacer una lista de varios cientos de personas necesitadas, a las cuales tomó bajo su cuidado especial. Siempre se refería a los pobres como sus “señores y maestros”, debido a su poderosa influencia en la Corte del Altísimo. Ayudaba a todos los necesitados, sin importar a qué clase social perteneciesen. Así ayudó tres veces a un comerciante náufrago, en las primeras dos ocasiones sin hacerle aparentemente mucho bien; sin embargo, la tercera vez, Juan le suplió de un barco y una carga de trigo, y con vientos favorables fue llevado lejos a Bretaña, donde, debido a una escasez de trigo, obtuvo su propio precio. Otra persona, quien en realidad no estaba necesitado, le pidió limosnas y fue detectado por los oficiales de palacio; pero Juan solamente dijo: “Dadle a él, que puede ser Nuestro Señor disfrazado.” Visitaba los hospitales tres veces por semana, y liberó a muchos esclavos. Fue un reformador que atacó la simonía y luchó contra la herejía por medio de las mejoras en la educación religiosa. También reorganizó el sistema de pesas y medidas a favor de los pobres, y puso un alto a la corrupción entre los oficiales. Aumentó de siete a setenta el número de iglesias en Alejandría.
Se dice que Juan dedicó todos los ingresos de su sede para aliviar a los necesitados. Un hombre rico le regaló una magnífica sábana; él la aceptó por una noche, luego la vendió y dispuso en dinero para las limosnas. El hombre rico “compró” el artículo y de nuevo se lo regaló a Juan con el mismo resultado. Esto se repitió muchas veces; pero Juan señaló secamente: “Vamos a ver quien se cansa primero.” No fue Juan. Otro ejemplo de su piedad fue que mandó a cavar su propia tumba, pero sólo parcialmente, y designó a un sirviente que viniera ante él en varias ocasiones y le dijera: “Mi Señor, tu tumba está inconclusa; ora y da órdenes para su terminación, pues no conoces el día ni la hora cuando la muerte te agarre.” Cuando los persas saquearon a Jerusalén en 614, Juan envió grandes cantidades de comida, vino y dinero a los cristianos que huían. Pero eventualmente los persas ocuparon Alejandría, y Juan mismo en su ancianidad se vio obligado a huir a su país natal, donde murió.
Su cuerpo fue llevado a Constantinopla, de ahí a Ofen por el rey Matías Corvino de Hungría; de ahí en 1530 a toll cerca de Presburgo, y finalmente en 1632 a la catedral de Presburgo. Fue el santo patrón original de los Hospitalarios y los griegos lo conmemoran el 12 de noviembre. Su vida, escrita por Leoncio de Neápolis, en Chipre, fue traducida al latín por Anastasio Bibliotecario en el siglo IX y fue referida al Séptimo Concilio General.
Bibliografía: SCHR=99DL in Kirchenlex., s.v. Johannes, der Almosengeber; BUTLER, Vidas de los Santos; Acta SS., II Jan., 495 ss.; DAVIDSON en Dicc. Biog. Crist., s.v. Joannes (15); MIGNE, P.G., XCIII, CXVII; LEQUIEN, Oriens Christ., II, 445; PALAFOX Y MENDOZA, Vida de S. Juan (Madrid, 1762).
Fuente: Brown, C.F. Wemyss. "St. John the Almsgiver." The Catholic Encyclopedia. Vol. 8. New York: Robert Appleton Company, 1910. <http://www.newadvent.org/cathen/08486a.htm>.
Traducido por Luz María Hernández Medina