Lámparas Cristianas Primitivas

De las distintas clases de restos de la antigüedad cristiana, no hay, probablemente, ninguno tan numerosamente representado como el de las pequeñas lámparas de arcilla adornadas con símbolos cristianos. Se ha encontrado lámparas de esta clase en todos los centros antiguos del cristianismo, pero las catacumbas romanas son especialmente notables por la gran cantidad de estos frágiles utensilios que contienen, muchas de las cuales, sin embargo, no tienen ninguna marca intrínseca de su origen cristiano.

Estas lámparas de arcilla pertenecen a dos categorías: la más antigua fabricada en el periodo imperial temprano y el tipo de la época de Constantino. Incluso en este no muy conspicuo departamento de las artes y la artesanía, hubo una declinación notable entre el siglo I y el IV ó V; las lámparas de arcilla de la época antigua son de una mano de obra muy superiores a las de este último. También hay una diferencia entre las dos clases; las lámparas de la época clásica son redondas con un asa perforada ascendente, mientras que las lámparas típicas de la época cristiana se asemejan algo a un barco o un zapato con un asa sin perforar corriendo a un extremo. En las lámparas de origen egipcio los mangos se soldaban después que se moldeaba la lámpara. El símbolo favorito, aunque de ningún modo el único, que adornaba las lámparas de origen cristiano era el monograma de Constantino (lábaro). En algunos casos estaban adornadas con la figura de un santo, a veces acompañada de una inscripción.

También se han encontrado lámparas de bronce de origen cristiano, y, aunque mucho menos frecuentes que las lámparas de arcilla descritas, son de mucho mayor interés. Una de las más notables es una lámpara de bronce del siglo V, ahora en San Petersburgo, que toma la forma de una basílica cristiana primitiva. De igual interés es una lámpara de bronce en la galería de los Uffizi en Florencia, la cual tiene la forma de un barco, con las velas infladas y dos estatuillas de bronce, que se supone representan a San Pedro y San Pablo en la proa. También existen lámparas de bronce en formas de paloma, pato, pavo real, cuervo, etc. El museo de Argel contiene una muestra de una lámpara montada sobre un pedestal, de excelente hechura, adornada con las letras griegas apocalípticas A y D, y un delfín.

Muchas de las lámparas de oro y plata presentadas por Constantino el Grande a la Basílica de Letrán eran también en forma de delfines, según nos informa el "Liber Pontificalis"; las lámparas en forma del pez simbólico eran probablemente comunes, aunque sólo se conoce una de terracota. Las lámparas presentadas por Constantino a la de Letrán ---un regalo [[verdaderamente imperial--- sumaban un total de 174 arañas y candeleros, que proveían, según se calcula, 8,730 luces separadas. El más precioso de ellos es la araña "de oro puro", con un peso de 50 libras y adornada con 50 delfines, que colgaban del ciborio; las cadenas, además, pesaban 25 libras. Delante del altar mayor había una araña de plata que pesaba 50 libras adornada con 20 delfines. La nave estaba iluminada por 45 pedestales de plata (fara canthara), el pasillo de la derecha por 40 y el de la izquierda por 45. Además de estas arañas para lámparas, la nave contenía 50 pedestales plateados para velas, mientras que delante de cada uno de los siete altares de la basílica había un candelabro de diez pies de alto, hecho de cobre incrustado con relieves en plata que representaba a los profetas. Constantino también les regaló preciosos candelabros, aunque en menor número, a las basílicas de San Pedro, San Pablo, Santa Croce, Santa Inés y San Lorenzo ("Liber Pontificalis", ed. Duchesne, I, 172 y ss.).

Bibliografía: BABINGTON en SMITH Y CHEETHAM, Dictionary of Christian Antiquities (Londres, 1875-80), s.v. Lamps; LOWRIE, Monuments of the Early Church (NUEVA YORK, 1901): LECLERCQ, Manuel d'Archeologie Chretienne (París, 1907); DE WAAL in KRAUS, Real-Encyklopadie der christlichen Alterthumer (Friburgo, 1882-86), s.v. Lampen.

Fuente: Hassett, Maurice. "Early Christian Lamps." The Catholic Encyclopedia. Vol. 8. New York: Robert Appleton Company, 1910. 21 Feb. 2012 <http://www.newadvent.org/cathen/08770a.htm>.

Traducido por Luz María Hernández Medina