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Jueves, 28 de marzo de 2024

Diferencia entre revisiones de «Einhard»

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(Menos correcto EGINHARD) Historiador, nació cerca de 770 en el distrito bañado por el río Main, en la parte oriental del Imperio [[Francos||Franco]]; murió el 14 de marzo de 840 en Seligenstadt. Recibió su primera formación en el [[monasterio]] de [[Fulda]], donde mostró tales facultades [[Mente|mentales]] que el [[abad]] Baugulfo le envió a la corte de [[Carlomagno]]. Completó su [[educación]] en la [[Escuela]] Palatina, donde tuvo la fortuna de contar entre sus maestros al gran [[Alcuino]], quien fue testigo de su sorprendente talento para las matemáticas y la arquitectura, así como también del hecho de que, a pesar de su escaso encanto [[Persona|personal]], se contó entre los más fieles consejeros del emperador. Carlomagno le confió sus grandes edificios públicos, por ejemplo, la construcción de la [[catedral]] de [[Aquisgrán]] y los palacios de esta ciudad e Ingelheim, por cuya razón fue conocido dentro de los círculos cortesanos como [[Beseleel]], por el constructor del [[tabernáculo]] (Éx. 21). Carlomagno dispuso del tacto y [[prudencia]] de Einhard para confiarle varias misiones diplomáticas. Así, en 802 tuvo en sus manos las negociaciones para el intercambio de distinguidos rehenes sajones, y en 806 fue despachado a [[Roma]] para obtener la [[aprobación]] [[Papa|papal]] para la partición del imperio que el emperador tenía en mente.  
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'''Einhard''' (menos correcto Eginhard), historiador; nació cerca de 770 en el distrito bañado por el río Main, en la parte oriental del [[los Francos |Imperio Franco]]; murió el 14 de marzo de 840 en Seligenstadt.     Recibió su primera formación en el [[monasterio]] de [[Fulda]], donde mostró tales facultades [[mente |mentales]] que el [[abad]] Baugulfo le envió a la corte de [[Carlomagno]].   Completó su [[educación]] en la [[escuelas |Escuela]] Palatina, donde tuvo la fortuna de contar entre sus maestros al gran [[Alcuino]], quien fue testigo de su sorprendente talento para las matemáticas y la arquitectura, así como también del hecho de que, a pesar de su escaso encanto [[persona]]l, estuvo entre los consejeros más confiables del emperador. Carlomagno le confió sus grandes edificios públicos, por ejemplo, la construcción de la [[catedral]] de [[Aquisgrán]] y los palacios de esta ciudad e Ingelheim, por cuya razón fue conocido dentro de los círculos cortesanos como [[Beseleel]], por el constructor del [[tabernáculo]] ([[Éxodo |Éx.]] 21).   Carlomagno también aprovechó el tacto y [[prudencia]] de Einhard para confiarle varias misiones diplomáticas. Así, en 802 puso en sus manos las negociaciones para el intercambio de distinguidos rehenes sajones, y en 806 fue despachado a [[Roma]] para obtener la [[aprobación]] [[Papa |papal]] para la partición del imperio que el emperador tenía en [[mente]].
  
Durante el reinado de Luis el Piadoso conservó su posición de confianza y [[Prueba|probó]] ser un fiel consejero de Lotario, hijo de Luis. Habiendo fracasado, sin embargo, en sus intentos por pacificar las luchas por la corona que había agitado la emperatriz Judith, e incapaz de lograr una reconciliación duradera entre Luis y sus hijos, Einhard, en 830, se retiró a Mühlheim (Mulinheim) en el  Main, que le había sido otorgado como feudo en 815, juntamente con otras propiedades, como gesto de favor imperial. Hizo trasladar allí las [[reliquias]] de los Santos Marcelino y Pedro, y llamó al lugar Seligenstadt (“ciudad bendita” n.t.). Además, entre 831 y 834, Einhard fundó una [[abadía]] [[Orden Benedictina|benedictina]], donde, después de la muerte de su esposa, Emma (o Imma), hermana del [[obispo]] Bernardo de Worms (y no hija de Carlomagno), pasó el resto de su vida como [[abad]]. No se sabe con certeza cuándo fue [[Órdenes Sagrados|ordenado]] [[sacerdote]]. Su epitafio fue escrito por [[Mauro Magnencio Rábano|Rábano Mauro]].  
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Durante el reinado de Luis el Piadoso conservó su posición de confianza y probó ser un fiel consejero de Lotario, hijo de Luis.   Habiendo fracasado, sin embargo, en sus intentos por pacificar las luchas por la corona que había agitado la emperatriz Judith, e incapaz de lograr una reconciliación duradera entre Luis y sus hijos, en 830 Einhard se retiró a Mühlheim (Mulinheim) en el  Main, que le había sido otorgado ya para 815, junto con otras [[propiedad]]es, como gesto de favor imperial.   Hizo trasladar allí las [[reliquias]] de los Santos Marcelino y Pedro, y llamó al lugar Seligenstadt (“ciudad bendita” n.t.). Además, entre 831 y 834, Einhard fundó una [[abadía]] [[Orden Benedictina |benedictina]], donde, después de la muerte de su esposa, Emma (o Imma), hermana del [[obispo]] Bernardo de Worms (y no hija de [[Carlomagno]]), pasó el resto de su vida como [[abad]].   No se sabe con certeza si fue [[Órdenes Sagradas |ordenado]] [[sacerdote]]. Su epitafio fue escrito por [[Mauro Magnencio Rábano|Rábano Mauro]].
  
La más importante de las obras de Einhard es la “Vita Caroli Magni”. La Vita, la mejor biografía de toda la [[Edad Media]], fue escrita a imitación de Suetonio, en concreto de su “Vita Augusti”, y muestra al emperador desde la perspectiva de su entorno más íntimo y personal con todos los rasgos de su carácter, así como con un sincero intento de descripción verídica. Su estilo es elegante en general, aunque no pulido. Los anales del imperio carolingio, que tradicionalmente se atribuyen a Einhard (ed. Kurze, 1895), son, en su forma actual, materiales anteriores sobre los que trabajó. Las noticias para los años entre 796 y 820 podrían remontarse a Einhard. Además, tenemos de su puño la “Translatio et Miracula Ss. Marcellini et Petri”, que relata hechos importantes para la historia de la cultura. Las setenta y una epístolas, escritas por Einhard entre 825 y 830 en estilo claro y conciso, constituyen una importante fuente para la historia de Luis el Piadoso.  
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La más importante de las obras de Einhard es la “Vita Caroli Magni”. Esta, la mejor biografía de toda la [[Edad Media]], escrita en cercana imitación de Suetonio, particularmente su “Vita Augusti”, muestra al emperador desde la perspectiva de su entorno más íntimo y personal con todos los rasgos de su [[carácter]], así como con un sincero intento de descripción verídica. Su estilo es elegante en general, aunque no pulido. Los anales del imperio [[Carlomagno |carolingio]], que nos han llegado como de Einhard (ed. Kurze, 1895), son, en su forma actual, materiales anteriores trabajados.   Aquellos entre los años de 796 y 820 podrían remontarse a Einhard. Además, tenemos de su puño la “Translatio et Miracula Ss. Marcellini et Petri”, que contienen información importante para la historia de la cultura. Las setenta y una epístolas, escritas por Einhard entre 825 y 830 en estilo claro y conciso, constituyen una importante fuente para la historia de Luis el Piadoso.
  
  
'''Fuente''': Schlager, Patricius. "Einhard." The Catholic Encyclopedia. Vol. 5. New York: Robert Appleton Company, 1909. <http://www.newadvent.org/cathen/05366b.htm>.
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'''Fuente:'''  Schlager, Patricius. "Einhard." The Catholic Encyclopedia. Vol. 5, págs. 366-367. New York: Robert Appleton Company, 1909. 29 Dec. 2019 <http://www.newadvent.org/cathen/05366b.htm>.
  
Traducido por Rafael Barroso Cabrera.  L H M.
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Traducido por Rafael Barroso Cabrera.  lmhm

Última revisión de 01:47 30 dic 2019

Einhard (menos correcto Eginhard), historiador; nació cerca de 770 en el distrito bañado por el río Main, en la parte oriental del Imperio Franco; murió el 14 de marzo de 840 en Seligenstadt. Recibió su primera formación en el monasterio de Fulda, donde mostró tales facultades mentales que el abad Baugulfo le envió a la corte de Carlomagno. Completó su educación en la Escuela Palatina, donde tuvo la fortuna de contar entre sus maestros al gran Alcuino, quien fue testigo de su sorprendente talento para las matemáticas y la arquitectura, así como también del hecho de que, a pesar de su escaso encanto personal, estuvo entre los consejeros más confiables del emperador. Carlomagno le confió sus grandes edificios públicos, por ejemplo, la construcción de la catedral de Aquisgrán y los palacios de esta ciudad e Ingelheim, por cuya razón fue conocido dentro de los círculos cortesanos como Beseleel, por el constructor del tabernáculo (Éx. 21). Carlomagno también aprovechó el tacto y prudencia de Einhard para confiarle varias misiones diplomáticas. Así, en 802 puso en sus manos las negociaciones para el intercambio de distinguidos rehenes sajones, y en 806 fue despachado a Roma para obtener la aprobación papal para la partición del imperio que el emperador tenía en mente.

Durante el reinado de Luis el Piadoso conservó su posición de confianza y probó ser un fiel consejero de Lotario, hijo de Luis. Habiendo fracasado, sin embargo, en sus intentos por pacificar las luchas por la corona que había agitado la emperatriz Judith, e incapaz de lograr una reconciliación duradera entre Luis y sus hijos, en 830 Einhard se retiró a Mühlheim (Mulinheim) en el Main, que le había sido otorgado ya para 815, junto con otras propiedades, como gesto de favor imperial. Hizo trasladar allí las reliquias de los Santos Marcelino y Pedro, y llamó al lugar Seligenstadt (“ciudad bendita” n.t.). Además, entre 831 y 834, Einhard fundó una abadía benedictina, donde, después de la muerte de su esposa, Emma (o Imma), hermana del obispo Bernardo de Worms (y no hija de Carlomagno), pasó el resto de su vida como abad. No se sabe con certeza si fue ordenado sacerdote. Su epitafio fue escrito por Rábano Mauro.

La más importante de las obras de Einhard es la “Vita Caroli Magni”. Esta, la mejor biografía de toda la Edad Media, escrita en cercana imitación de Suetonio, particularmente su “Vita Augusti”, muestra al emperador desde la perspectiva de su entorno más íntimo y personal con todos los rasgos de su carácter, así como con un sincero intento de descripción verídica. Su estilo es elegante en general, aunque no pulido. Los anales del imperio carolingio, que nos han llegado como de Einhard (ed. Kurze, 1895), son, en su forma actual, materiales anteriores trabajados. Aquellos entre los años de 796 y 820 podrían remontarse a Einhard. Además, tenemos de su puño la “Translatio et Miracula Ss. Marcellini et Petri”, que contienen información importante para la historia de la cultura. Las setenta y una epístolas, escritas por Einhard entre 825 y 830 en estilo claro y conciso, constituyen una importante fuente para la historia de Luis el Piadoso.


Fuente: Schlager, Patricius. "Einhard." The Catholic Encyclopedia. Vol. 5, págs. 366-367. New York: Robert Appleton Company, 1909. 29 Dec. 2019 <http://www.newadvent.org/cathen/05366b.htm>.

Traducido por Rafael Barroso Cabrera. lmhm