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Jueves, 5 de diciembre de 2024

Diferencia entre revisiones de «Publicano»

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Publicano, en los [[Evangelios]], se deriva de publicanus de la [[Revisión de la Vulgata|Vulgata]], y significa un miembro o empleado de las compañías financieras romanas que arrendaba la recolección de impuestos.  Desde el tiempo de la República el estado romano se libró del problema de cobrar los impuestos en las provincias usando el método de ponerlos en subasta por una suma alzada.  El licitador más alto recibía autorización para exigir la suma de la provincia en cuestión.  Tal sistema brindaba amplia oportunidad para las exacciones rapaces de parte de la compañía y sus oficiales, y a menudo los abusos eran intolerables.  Debido a éstos y más, quizás, debido al [[odio]] natural e impotente de los [[Judaísmo|judíos]] a la supremacía romana, los judíos que se lucraban sirviendo así a los gobernantes extranjeros eran objeto de la execración de sus paisanos.  En los relatos evangélicos los encontramos como una clase habitualmente unida a la de los “[[pecado]]res” y a los “[[Paganismo|paganos]]”.  La actitud de [[Jesucristo|Cristo]] hacia ellos, así como hacia otras clases despreciadas, fue la de una empatía de promoción.  Un gran reproche que le hacían sus enemigos, los rigurosos [[escribas]] y [[fariseos]], era su amistad y asociación con publicanos y pecadores; y consistentemente con esta conducta le plació escoger a Leví o Mateo el Publicano como uno de sus doce [[Los Apóstoles|apóstoles]] ([[Evangelio según San Mateo|Mt.]] 9,9).
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'''Publicano''', en los [[Evangelios]], se deriva de ''publicanus'' de la [[Revisión de la Vulgata|Vulgata]], y significa un miembro o empleado de las compañías financieras romanas que arrendaba la recolección de impuestos.  Desde el tiempo de la República el estado romano se libró del problema de cobrar los impuestos en las provincias usando el método de ponerlos en subasta por una suma alzada.  El licitador más alto recibía autorización para exigir la suma de la provincia en cuestión.  Tal sistema brindaba amplia oportunidad para las exacciones rapaces de parte de la compañía y sus oficiales, y a menudo los abusos eran intolerables.  Debido a éstos y más, quizás, debido al [[odio]] natural e impotente de los [[Judaísmo|judíos]] a la supremacía romana, los judíos que se lucraban sirviendo así a los gobernantes extranjeros eran objeto de la execración de sus paisanos.  En los relatos evangélicos los encontramos como una clase habitualmente unida a la de los “[[pecado]]res” y a los “[[Paganismo|paganos]]”.  La actitud de [[Jesucristo|Cristo]] hacia ellos, así como hacia otras clases despreciadas, fue la de una empatía de promoción.  Un gran reproche que le hacían sus enemigos, los rigurosos [[escribas]] y [[fariseos]], era su amistad y asociación con publicanos y pecadores; y consistentemente con esta conducta le plació escoger a Leví o [[San Mateo |Mateo]] el Publicano como uno de sus doce [[Los Apóstoles|apóstoles]] ([[Evangelio según San Mateo|Mt.]] 9,9).
  
  

Última revisión de 19:16 26 jul 2019

Publicano, en los Evangelios, se deriva de publicanus de la Vulgata, y significa un miembro o empleado de las compañías financieras romanas que arrendaba la recolección de impuestos. Desde el tiempo de la República el estado romano se libró del problema de cobrar los impuestos en las provincias usando el método de ponerlos en subasta por una suma alzada. El licitador más alto recibía autorización para exigir la suma de la provincia en cuestión. Tal sistema brindaba amplia oportunidad para las exacciones rapaces de parte de la compañía y sus oficiales, y a menudo los abusos eran intolerables. Debido a éstos y más, quizás, debido al odio natural e impotente de los judíos a la supremacía romana, los judíos que se lucraban sirviendo así a los gobernantes extranjeros eran objeto de la execración de sus paisanos. En los relatos evangélicos los encontramos como una clase habitualmente unida a la de los “pecadores” y a los “paganos”. La actitud de Cristo hacia ellos, así como hacia otras clases despreciadas, fue la de una empatía de promoción. Un gran reproche que le hacían sus enemigos, los rigurosos escribas y fariseos, era su amistad y asociación con publicanos y pecadores; y consistentemente con esta conducta le plació escoger a Leví o Mateo el Publicano como uno de sus doce apóstoles (Mt. 9,9).


Bibliografía: MAAS, Coment. al Evangelio de San Mateo (Nueva York, 1898); DIETRICH, Die rechtliche Natur der Societas publicanorum (Meissen, 1889); THIBAULT, Les douanes chez les Romains (París, 1888).

Fuente: Driscoll, James F. "Publican." The Catholic Encyclopedia. Vol. 12. New York: Robert Appleton Company, 1911. <http://www.newadvent.org/cathen/12553d.htm>.

Traducido por Luz María Hernández Medina.