San Herbert de Derwentwater
De Enciclopedia Católica
(Hereberht) Se desconoce su fecha de nacimiento; murió el 20 de marzo de 687, fue un ancorita del Siglo VII que vivió durante muchos años en lo que aún se conoce como la isla de San Herbert, en el lago de Derwentwater. Fue durante mucho tiempo amigo y discípulo de San Cuthbert de Lindisfarne.
Se tienen pocos datos acerca de su vida, aunque se reconoce que era su costumbre visitar cada año a San Cuthbert a fin de recibir de este último dirección en asuntos espirituales. En el año 686, al escuchar que su amigo se encontraba visitando a la Reina Eomenburg, fue hasta ese lugar en vez de ir a Lindisfarne como era usual.
Luego de que habían conversado, al final, San Cuthbert le indicó, “hermano Herbert, dime lo que tengas que decirme o preguntarme, porque no nos veremos más en esta vida; el tiempo de mi partida está cercano”. Al escuchar esto, Herbert cayó llorando a los pies de su amigo y le pidió que se le concediera la gracia, de poder juntos alabar en el cielo a Dios. San Cuthbert oró y dijo, “levántate mi hermano, no llores, que la misericordia de Dios ha estado de acuerdo con tu pedido”, y así sucedió.
Al regresar a su ermita, Herbert cayó enfermo y mediante su larga enfermedad, purificó sus imperfecciones, murió el mismo día que lo hacía San Cuthbert en la Santa Isla. Se dice que la capilla que contiene los restos de San Herbert aún puede ser localizada en la parte norte de la isla en la que vivió. En 1374 Tomás Appleby, Obispo de Carlisle, concedió una indulgencia de cuarenta días a todos los que, en honor a San Herbert, visitaran la isla en Derwentwater, y estuvieran presente en la misa cantada que anualmente se celebraría en honor a San Cuthbert, por el Vicario de Crosthwaite.
Acta SS., 20 March, III, 110, 123, 142-43; BEDE, Historia Ecclesiastica, IV, xxix, in Mon. Hist. Brit., 245; RAINE, Saint Cuthbert (Durham, 1828), 32-33; RAINE in Dict. Christ. Biog. s.v.; STANTON, Menology of England and Wales (London, 1887), 127-8.
LESLIE A. ST. L. TOKE Transcripción de Herman F. Holbrook Traducción al castellano de Giovanni E. Reyes Oh San Herbert, y todos los santos monjes y ermitaños, rueguen por nosotros.