Papa Juan V

(685-686).

Un sirio cuyo padre fue Ciriaco; se desconoce cuándo nació; muerto el 2 de agosto del 686. Representó a la sede Apostólica durante el Sexto Concejo Ecuménico. Regresó a Roma en julio de 682 con los documentos oficiales del sínodo. Fue tan apreciado a los ojos del Emperador Constantino Pogonato, que éste redujo los impuestos sobre los patrimonios papales en Sicilia y Calabria, también redujo las barreras arancelarias de las que sufría la iglesia.

La energía, afán de aprendizaje y moderación de Juan son destacados por su biógrafo. Que tuviera estas virtudes fueron sin duda causales de su elección como Papa en la basílica de San Juan Laterano. Juan fue inmediatamente conducido al palacio laterano como Papa debido a que Constantino Pognato había ya abolido la necesidad de esperar la confirmación imperial. Fue consagrado el 23 de julio del 685, y su papado duró poco más de un año. Desde los días de San Gregorio el Grande, el Arzobispo de Cagliari en Cerdeña gozó de ciertos poderes metropolitanos.

Aunque el derecho de consagrar obispos en la isla no era uno de sus priviliegios, Citonatus de Cagliari impuso las manos al obispo-electo de Turris Libisonis. Juan, sin embargo, declaró la sede de Turris directamente sujeta a la Santa Sede. La generosidad de Juan se mostró en sus donaciones liberales. Durante su corto pontificado distribuyó 1900 solidi al clero y a los decanatos por los pobres. Después de una prolongada enfermedad, murió el 2 de agosto del 686, y fue enterrado en la Basílica de San Pedro.

HORACE K. MANN Transcrito por S. Rohrbach En Honor a la familia de K.V. Rohrbach Traducción por Juan Carlos Guzmán S.