Papa Inocencio VII
De Enciclopedia Católica
(Cosimo de`Migliorati) Nació en una familia humilde en Sulmona, en el Abruzzi, alrededor del 1336; murió el 6 de Noviembre del 1406. Estudió en Perugia, Padua y finalmente en Bolonia donde le graduó el famoso jurista Lignano. Después de enseñar jurisprudencia en Perugia y Padua durante algún tiempo, acompañó a su profesor, Lignano, a Roma donde fue recibido en la Curia por Urbano VI (1378-89). Poco después de su llegada a Roma Urbano le envió a Inglaterra en calidad de recaudador papal donde permaneció, aproximadamente, diez años. En su retorno a Roma se convirtió en Obispo de Bolonia en el 1386 y el 5 de Diciembre de 1387 en Arzobispo de Ravenna. En esta última sede se mantuvo hasta el 15 de Septiembre del 1400. En 1389 Bonifacio IX le nombró Sacerdote-Cardenal de la Santa Cruz en Jerusalén y le envió como legado a Lombardia y a la Toscana en 1390. Fue universalmente estimado por su piedad y enseñanzas, además de ser un hábil gestor de los asuntos financieros.
El 17 de Octubre de 1404 fue elegido Papa y tomó el nombre de Inocencio VII. Su pontificado coincidió con el cisma de Occidente; el Papa rival fue Benedicto XIII (1394-1423). Previamente a su elección Inocencio VII, como otros cardenales, había jurado intentarlo todo, incluso si eso suponía renunciar la tiara, con el fin de acabar con el cisma. Poco después de acceder al Papado comenzó a dar los pasos necesarios para mantener su juramento y convocó un Concilio pero los disturbios ocurridos en Roma hicieron que las buenas intenciones del Papa se esfumaran. Elementos revolucionarios entre los romanos se levantaron contra la autoridad temporal del Papa y el Rey Ladislao de Nápoles tuvo que acudir a Roma a toda prisa para ayudar al Papa a acabar con la insurrección. Por los servicios prestados, el rey exhortó varias concesiones a Inocencio, entre ellas, la promesa de que no llegaría a ningún acuerdo con el Papa rival sin asegurarse antes de que los derechos del rey sobre Nápoles permanecerían intactos. No contento con estas concesiones, a las que Inocencio se sometió en beneficio de la paz, Ladislao deseaba extender su dominio sobre Roma y el territorio eclesiástico. Para alcanzar sus anhelos, ayudó a la facción Gibelina de Roma en sus atentados revolucionarios en el 1405. Inocencio había cometido el gran error de elevar inmerecidamente a su sobrino, Ludivico Migloriati, a la categoría de Cardenal. Este acto de nepotismo fue la única falta que cometió durante su corto papado y a pesar de haber sido un hombre virtuoso en todo lo demás, esto le costó caro. El cardenal, enfurecido porque los Romanos se revelaban contra su tío, acechó a algunos con mayor influencia entre ellos cuando regresaban de una conferencia con el Papa y los llevó hasta su casa con el fin de asesinarlos. La gente se indignó mucho con este cruel acto y el Papa tuvo que huir para salvar la vida a pesar de no ser, en absoluto, responsable del crimen cometido por su sobrino. Estableció su domicilio en Viterbo hasta que los Romanos le pidieron que regresara en el 1406. Nuevamente reconocieron su autoridad pero un pelotón de tropas que el Rey Ladislao de Nápoles había enviado en ayuda de Colonia todavía ocupaban el castillo de Sant´Angelo y realizaban frecuentes incursiones en Roma y sus alrededores. Solo después de que Ladislao fuese excomulgado accedió a las demandas del Papa y retiró sus tropas. En medio de todos estos disturbios políticos Inocencio descuidó lo que era más esencial para el bienestar de la Iglesia, la supresión del cisma. Su rival, Benedicto XIII, hizo creer que el único obstáculo para el final del cisma era la falta de voluntad de Inocencio VII. Las razones por las que Inocencio no hizo prácticamente nada para acabar con el cisma fueron: el problemático estado de los asuntos en Roma, su desconfianza en la sinceridad de Benedicto XIII y la actitud hostil del Rey Ladislao de Nápoles. Poco antes de su muerte planificó la restauración de la Universidad Romana pero su muerte dejó este proyecto aparcado.
Vita Innocentii VII in Liber Pontificalis, ed. DUCHESNE, II (Paris, 1892), 508-10, 531-3, 552-4; and in MURATORI, Rerum Italicarum Scriptores ab anno 500 ad 1500, III (Milan, 1723-51), ii, 832 sq.; BRAND, Innocenzo VII ed il delitto di suo nipote Ludovico Migliorati in Studi e Documenti di Storia e Diritto, XXI (Rome, 1900); BLIEMETZRIEDER, Das Generalkonzil im grossen abendlandischen Schisma (Paderborn, 1904); IDEM, Die Konzilsidee unter Innocenz VII. und König Ruprecht von der Pfalz in Studien und Mitteilungen aus dem Benediktiner und dem Cistercienser Orden, XXVII (Brünn, 1906), 355-68; VERNET, Le Pape Innocent VII et les Juifs in L'Université Catholique, XV (Lyons. 1894), 399-408; KNEER, Zur Vorgeschichte Papst Innocenz VII. in Historisches Jahrbuch, XII (Munich, 1891), 347-351.
MICHAEL OTT Transcrito por Douglas J. Potter Traducido por Alicia Fernández Jarrín