Diferencia entre revisiones de «Bendición y dedicación del Santuario de Nuestra Señora de la Expectación de Zapopan»
De Enciclopedia Católica
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| − | A finales del siglo XVII, la fama taumaturga de Nuestra Señora de la Expectación de Zapopan se había extendido por el Reino de la Nueva Galicia, por ello, no es coincidencia, que el amor de los fieles devotos, encabezados por sus Obispos, decidieran que el templo de la Reina de los ángeles, fuera un magnífico palacio en el que se ofrendaran solemnes cultos en su honor | + | A finales del siglo XVII, la fama taumaturga de Nuestra Señora de la Expectación de Zapopan se había extendido por el Reino de la Nueva Galicia, por ello, no es coincidencia, que el amor de los fieles devotos, encabezados por sus Obispos, decidieran que el templo de la Reina de los ángeles, fuera un magnífico palacio en el que se ofrendaran solemnes cultos en su honor. |
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| + | ==La morada de la Madre de Dios en Zapopan== | ||
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| + | Al ser donada la imagen de nuestra señora de la Limpia Concepción a los habitantes del repoblado caserío de Tzapopan hacia la mitad del siglo XVI, inmediatamente se construyó una sencilla ermita de adobe y zacate que resguardara a su Patrona, donde los naturales arrobados por la gracia de la imagen que parecía una prodigiosa niña, ofrendaban flores silvestres y cantos, mostrándose prestos al servicio de tan gran Señora. | ||
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| + | La venerable imagen al hacerse maravillosa y singular, antonomásticamente se creó un título nuevo, título que dejó en desuso el antiguo impuesto al pueblo, y también los que se habían dado a la imagen misma, tomando la Santa Imagen el que el pueblo llevara en su gentilidad: y resultó el llamarse, como advocación enteramente nueva y particular: Nuestra Señora de Zapopan. | ||
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| + | Con el paso del tiempo, los habitantes de Zapopan se vieron beneficiados por los prodigios que eran obtenidos de Dios, por medio de aquella a quien invocaban representada en esta imagen, viéndose la población colmada de prosperidad y abundancia. Fue en 1609, cuando la pequeña iglesia sufrió ruina: Al encontrarse podridas las vigas por su antigüedad, se cayó el techo, destrozando todo lo que se encontraba en su interior, al estruendo causado, acudieron los nativos y viendo el daño, pronto comenzaron a apartar los ladrillos y maderos, descubriendo el altar y los bastidores del retablo hechos pedazos, pero para su mayor sorpresa, hallaron la Imagen sin ningún daño o lesión en su tabernáculo, lo que causó gran algarabía al ver que no los desamparaba la Reina de los Ángeles. | ||
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| + | Fue esta ruina, la que provocó que la venerable imagen saliera a peregrinar por varios pueblos en demanda de limosnas para su nueva iglesia; durante esas travesías se tienen registros de los muchos milagros obrados, siendo testigos principales los demandantes que cargaban la santa imagen. | ||
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| + | En 1638, ya para estarse por terminar la nueva iglesia, todavía se pedía limosna llevando la imagen original, siendo este, el último año pues: “se proveyeron de otra que en un todo la representase; así en la actitud, como en el adorno y en el tamaño… mediante cuya imagen tocada a la original se obraron bastantes milagros.” | ||
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| + | Hacia 1637 recibió la administración de este santuario el Bachiller don Diego de Herrera, quien por 19 años sirvió fielmente a Nuestra Señora, siendo él, a quien eligió por instrumento para descubrir y dar a conocer los sucesos milagrosos que por espacio de 100 años habían estado sucediendo. | ||
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| + | Una vez reconocida la brillante época del taumaturguismo de esta predilecta imagen, en 1653 se declaró por milagrosa y se asignó por mandato del Obispo don Juan Ruiz Colmenero que su fiesta se celebrase el 18 de diciembre, día en que la Iglesia visigótica recuerda el misterio de la Expectación. | ||
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| + | Cabe mencionar que dicho señor Obispo durante su visita pastoral al pueblo de Zapopan en 1649, ya había mandado que la imagen permaneciera bajo llave en su sitial, bajo pena de excomunión, mandando que permaneciera con las puertas cerradas del tabernáculo los días feriados y fiestas comunes, se abriera el nicho solo en las fiestas particulares, y que fuera descubierta completamente a los ojos del pueblo en las solemnidades de primera clase y mayor solemnidad. | ||
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| + | Sobre este primer Santuario se tiene la siguiente descripción: | ||
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| + | Tuvo 3 naves con pilares y arcos en cantería a seis por banda, techumbre de maderamen (estilo basilical) capilla mayor de bóveda, su coro, rejas, etc. El 18 de diciembre de 1660 se estrenó el retablo mayor dorado, acompañándolo otros, no desprovisto de argentería, etc. Quedaba arrimado al portal norte del atrio contiguo un hermoso osario (con cúpula y cuadro de ánimas, farol, etc.) la puerta mayor viendo al sur. | ||
Revisión de 15:38 29 ago 2022
Presentación
A finales del siglo XVII, la fama taumaturga de Nuestra Señora de la Expectación de Zapopan se había extendido por el Reino de la Nueva Galicia, por ello, no es coincidencia, que el amor de los fieles devotos, encabezados por sus Obispos, decidieran que el templo de la Reina de los ángeles, fuera un magnífico palacio en el que se ofrendaran solemnes cultos en su honor.
La morada de la Madre de Dios en Zapopan
Al ser donada la imagen de nuestra señora de la Limpia Concepción a los habitantes del repoblado caserío de Tzapopan hacia la mitad del siglo XVI, inmediatamente se construyó una sencilla ermita de adobe y zacate que resguardara a su Patrona, donde los naturales arrobados por la gracia de la imagen que parecía una prodigiosa niña, ofrendaban flores silvestres y cantos, mostrándose prestos al servicio de tan gran Señora.
La venerable imagen al hacerse maravillosa y singular, antonomásticamente se creó un título nuevo, título que dejó en desuso el antiguo impuesto al pueblo, y también los que se habían dado a la imagen misma, tomando la Santa Imagen el que el pueblo llevara en su gentilidad: y resultó el llamarse, como advocación enteramente nueva y particular: Nuestra Señora de Zapopan.
Con el paso del tiempo, los habitantes de Zapopan se vieron beneficiados por los prodigios que eran obtenidos de Dios, por medio de aquella a quien invocaban representada en esta imagen, viéndose la población colmada de prosperidad y abundancia. Fue en 1609, cuando la pequeña iglesia sufrió ruina: Al encontrarse podridas las vigas por su antigüedad, se cayó el techo, destrozando todo lo que se encontraba en su interior, al estruendo causado, acudieron los nativos y viendo el daño, pronto comenzaron a apartar los ladrillos y maderos, descubriendo el altar y los bastidores del retablo hechos pedazos, pero para su mayor sorpresa, hallaron la Imagen sin ningún daño o lesión en su tabernáculo, lo que causó gran algarabía al ver que no los desamparaba la Reina de los Ángeles.
Fue esta ruina, la que provocó que la venerable imagen saliera a peregrinar por varios pueblos en demanda de limosnas para su nueva iglesia; durante esas travesías se tienen registros de los muchos milagros obrados, siendo testigos principales los demandantes que cargaban la santa imagen.
En 1638, ya para estarse por terminar la nueva iglesia, todavía se pedía limosna llevando la imagen original, siendo este, el último año pues: “se proveyeron de otra que en un todo la representase; así en la actitud, como en el adorno y en el tamaño… mediante cuya imagen tocada a la original se obraron bastantes milagros.”
Hacia 1637 recibió la administración de este santuario el Bachiller don Diego de Herrera, quien por 19 años sirvió fielmente a Nuestra Señora, siendo él, a quien eligió por instrumento para descubrir y dar a conocer los sucesos milagrosos que por espacio de 100 años habían estado sucediendo.
Una vez reconocida la brillante época del taumaturguismo de esta predilecta imagen, en 1653 se declaró por milagrosa y se asignó por mandato del Obispo don Juan Ruiz Colmenero que su fiesta se celebrase el 18 de diciembre, día en que la Iglesia visigótica recuerda el misterio de la Expectación.
Cabe mencionar que dicho señor Obispo durante su visita pastoral al pueblo de Zapopan en 1649, ya había mandado que la imagen permaneciera bajo llave en su sitial, bajo pena de excomunión, mandando que permaneciera con las puertas cerradas del tabernáculo los días feriados y fiestas comunes, se abriera el nicho solo en las fiestas particulares, y que fuera descubierta completamente a los ojos del pueblo en las solemnidades de primera clase y mayor solemnidad.
Sobre este primer Santuario se tiene la siguiente descripción:
Tuvo 3 naves con pilares y arcos en cantería a seis por banda, techumbre de maderamen (estilo basilical) capilla mayor de bóveda, su coro, rejas, etc. El 18 de diciembre de 1660 se estrenó el retablo mayor dorado, acompañándolo otros, no desprovisto de argentería, etc. Quedaba arrimado al portal norte del atrio contiguo un hermoso osario (con cúpula y cuadro de ánimas, farol, etc.) la puerta mayor viendo al sur.
