Mayoría
De Enciclopedia Católica
( Latín majoritas)
Mayoría es el estado de una persona o cosa más grande o superior en relación con otra persona o cosa. En derecho canónico la expresión tiene tres acepciones principales:
(1) En las elecciones o deliberaciones de cualquier reunión, la mayoría significa un número de votos más alto. Hay una "mayoría absoluta", cuando el número de votos es superior a la mitad del número de votantes; hay "mayoría relativa" cuando los votos para un candidato, o partido, sobrepasan en número a los otorgados a cualquier otro. Existen, asimismo, algunas mayorías especiales requeridas en ciertos casos, como el de los dos tercios requeridos para las elecciones papales (vea cónclave, Elecciones Papales.
(2) En referencia a las personas, la mayoría es el estado de las personas que han llegado a la edad requerida para tales y tales actos definidos; en particular, para actos de la vida civil. Por regla general, la mayoría de edad se fija en veintiún años (vea MENOR).
(3) En el sentido jerárquico, mayoría es la superioridad de ciertas personas sobre otras debido al cargo o dignidad ocupado por la primera. Connota autoridad, o por lo menos precedencia; y su correlativo es la obediencia cuando se trata de la jurisdicción; deferencia y respeto cuando se trata de la dignidad. Así, en la Iglesia, el clero es superior a los laicos; entre el clero, se clasifica a los individuos de acuerdo a su jurisdicción, sus Órdenes Sagradas, etc.
En cierto sentido, incluso las edificaciones eclesiásticas tienen una precedencia jerárquica. La primera iglesia es la de San Juan de Letrán, la catedral del Papa, "madre y cabeza de todas las iglesias de Roma y del mundo"; luego vienen las basílicas “mayores”; luego las iglesias primaciales, la metropolitana, la catedral, la colegiata, etc. (cf. Decretal , I, tit.XXXIII, "De majoritate et ohedientia").
Fuente: Boudinhon, Auguste. "Majority." The Catholic Encyclopedia. Vol. 9. New York: Robert Appleton Company, 1910. <http://www.newadvent.org/cathen/09557a.htm>.
Traducido por Luz María Hernández Medina