Papa Silvestre II
De Enciclopedia Católica
Reinó en 999-1003; llamado también Gerberto. Nacido cerca de Aurillac, Auvergne, Francia alrededor de 940-950, de padres humildes, murió en Roma el 12 de mayo de 1003. Gerberto entró al servicio de la iglesia y recibió su primera educación en el monasterio de Aurillac. Fue llevado a España por un conde español, estudió en Barcelona y con maestros árabes en Córdoba y Sevilla, dando gran importancia a las matemáticas y ciencias naturales en las que progresó de forma poco común.
De España pasó a Roma con el obispo Hatto de Vich, que había sido su principal maestro en teología y Juan XIII le recomendó al emperador Otón I que le envió a Reims al archidiácono Gerannus. Pronto fue nombrado maestro en la escuela catedralicia por el arzobispo Adalbero. Hizo un viaje de considerable duración a Rávena donde mantuvo una disputa con Orticus de Magdeburgo, ante Otón II, quien en 983 le entregó la abadía de Bobbio; pero la abadía era muy pobre y Gerberto volvió a Reims, donde enseñó muchas ramas del saber con mucho éxito, se dedicó intensamente al estudio y ayudó a que Hugo Capeto subiera al trono. Adalbero quería que le sucediera Gerberto, pero cuando murió aquel en 988, la sede la obtuvo, por sugerencia de Hugo Capeto, Arnulfo, un hijo natural del rey Lotario. Arnulfo fue depuesto en 991 por un sínodo celebrado cerca de Reims, por traición contra el rey, y Gerberto fue elegido entonces. Pronto celebró Gerberto un sínodo para condenar a los que habían perjudicado a la propiedad de la iglesia, decisiones fueron confirmadas en otro sínodo celebrado en Chela bajo la presidencia del rey de Francia Roberto, hubo mucha oposición a la elevación de Gerberto a la sede de Reims.
Juan XV envió a León, abad de los Santos Bonifacio y Alexius de Roma, como legado en Francia. El 2 de junio de 995, León celebró un sínodo en Mouson. Gerberto apareció a defenderse, pero fue temporalmente suspendido de cargo episcopal. Intentó demostrar que el decreto era ilegal pero otro sínodo (concilium Causeiense), del 1 de julio, en el que Gerberto estaba presente, declaró que tanto la deposición de Arnulfo como la elección de Gerberto eran ilegales e inválidas.
Gerberto entonces se fue a la corte del joven emperador Otón III, del que fue maestro y al que acompañó a Italia para la coronación. Puesto que el arzobispado de Reims no le fue devuelto a Gerberto, permaneció en Italia y en 998 Gregorio V le nombró arzobispo de Rávena. Gerberto asistió al sínodo en el que se trataron los asuntos maritales del rey Roberto de Francia. Cuando Gregorio V murió el 18 de febrero de 999, Gerberto fue elegido su sucesor gracias a la influencia del emperador. Tomó el nombre de Silvestre. Era el primer papa francés. El nuevo papa llevó los asuntos de la iglesia con gran dedicación y profundo sentido de la responsabilidad. Su discurso sobre el oficio episcopal muestra su punto de vista sobre los principales pastores de la iglesia ("Sermo de informatione episocoporum", P.L., CXXXIX, 169 sq.). Tomó enérgicas medidas contra los abusos en la vida de los clérigos causados por la simonía y el concubinato y se preocupaba de que sólo hombres capaces, de vidas sin mancha, recibieran los cargos de obispos.
Sus relaciones con Otón III eran muy amistosas y aportó las ideas políticas del emperador. Otón le dio al papa ocho condados italianos que habían pertenecido antes a los Estados Pontificios, por un acto de donación que muchos cuestionan (Wilmans, "Jahrbucher des deutschen Reiches unten den sachsischen Kaisern", II, pt. II, 233 sq.). Al mismo tiempo, el emperador declaró que la Donación de Constantino era una falsificación. Durante la residencia de Otón en Roma en el invierno de 1000-1001 Silvestre celebró un sínodo romano el 1 de febrero de 1001, en presencia del emperador, en el que entre otras cosas, se discutieron los asuntos del convento de Gandersheim. Una revuelta romana contra el emperador forzó a éste y al papa a huir. Silvestre fue obligado a permanecer alejado durante varios meses durante los cuales la ciudad se convirtió en una guerra de partidos. El 27 de diciembre reunió un segundo sínodo en Todi por las dificultades de Gandersheim. Poco después estaba presente en la muerte de Otón.
Silvestre reguló importantes asuntos eclesiásticos en varios países. Poco después de ser elegido confirmó de nuevo a su antiguo oponente Arnulfo como arzobispo de Reims y el la bula que le envió, prueba que había abandonado su antigua postura respecto a la autoridad de las decisiones papales respecto a la disputada sede. El papa estableció un metropolitano eclesiástico de Polonia en Gnesen y otro en Hungría en Gran. El 27 de marzo de del año 1000 concedió el título de rey al gobernador de Hungría y le nombró Vicario papal del país. Mantuvo con energía la disciplina eclesiástica respecto a matrimonio del rey francés Roberto al que obligó a separase de Berta. Silvestre volvió a Roma poco después de la muerte de Otón, aunque los líderes de las diferentes facciones de nobles aun mantenían todo el poder. Poco más tarde murió. Su epitafio se ha conservado. Además de un tratado dogmático "De corpore et sanguine Domini", Silvestre escribió una serie de obras sobre filosofía, matemáticas y física, que se encuentran el P.L., CXXXIX. Tuvo fama de sabio, pero el pueblo sencillo consideraba esa sabiduría como un pacto don el diablo y se crearon muchas leyendas alrededor de su nombre. Se dice que introdujo el uso de los números árabes en Europa y que inventó el reloj de péndulo.
J.P. KIRSCH.
Transcrito por Bonnie y Gerald Morine.
traducido por Pedro Royo