La Ciudad de los Reyes y su Ángel Tonante
De Enciclopedia Católica
Hemos visto, que las representaciones de la plaza mayor de la Ciudad de los Reyes, se refieren tanto a lo Temporal como a lo Eterno. Veamos ahora, cómo ambas realidades, van unidas en la estatua que remata la fuente del virrey conde de Salvatierra.
La Emblemática, que ha sido creada para ser puesta al servicio de Dios, está basada en la Sagrada Escritura. Enseña deleitando; es decir: Su pedagogía está apoyada en la verdad del Evangelio de Padres y doctores de la Iglesia. Su permanencia en el tiempo, es el resultado de haber sido anotada en lengua latina, cuyos significados y giros alegóricos son los de la Antigüedad clásica, de los vale al momento de dar lecciones moralizadoras. Y su atrayente belleza – es decir, el estímulo sensorial, a partil del cual se inicia el proceso del entendimiento – adopta las formas del Mundo Antiguo. El Barroco es integrador. Respecto de asuntos humanos y terrenales, frecuentemente en proemios literarios y discursos laudatorios hay un recurso libérrimo a las comparaciones alegóricas. Cosa que no ocurre respecto de asuntos divinos.
Para el caso concreto de la Fama y Mercurio, en un contexto profano - generalmente poético y encomiástico- el uso de ambos personajes mitológicos, corresponde a las notas distintas y particulares de la Mitología clásica moralizada.
La Emblemática, que ha sido creada para ser puesta al servicio de Dios, está basada en la Sagrada Escritura. Enseña deleitando; es decir: Su pedagogía está apoyada en la verdad del Evangelio de Padres y doctores de la Iglesia. Su permanencia en el tiempo, es el resultado de haber sido anotada en lengua latina, cuyos significados y giros alegóricos son los de la Antigüedad clásica, de los vale al momento de dar lecciones moralizadoras. Y su atrayente belleza – es decir, el estímulo sensorial, a partil del cual se inicia el proceso del entendimiento – adopta las formas del Mundo Antiguo. El Barroco es integrador. Respecto de asuntos humanos y terrenales, frecuentemente en proemios literarios y discursos laudatorios hay un recurso libérrimo a las comparaciones alegóricas. Cosa que no ocurre respecto de asuntos divinos. Para el caso concreto de la Fama y Mercurio, en un contexto profano - generalmente poético y encomiástico- el uso de ambos personajes mitológicos, corresponde a las notas distintas y particulares de la Mitología clásica moralizada. (*)
Tratándose de temas sacros, especialmente los que implican Misterios Sagrados, componen emblemas de entraña temática clásica, para incluirlos moralizados, en contextos de pedagogía sagrada. Pongamos como ejemplos las expresiones <<Mercurios Soberanos>>, <<Simulacro de Fama>> , ¿<<Eres Miguel o Mercurio>>?, <<Soberbio Luzbel>>, <<Venid deidades>>.