Vocabulario litúrgico bizantino
De Enciclopedia Católica
Abú Halim: en la liturgia siro-oriental (la caldea) es el libro litúrgico que contiene la oración de la mañana, compuesto por Ella III Abú Halim (1176-1190), recogiendo material de autores más antiguos.
Acheropita (del a-cheiro-poiété = no hecha a mano) se dice de las imágenes sagradas no hechas por manos humanas. El Mandylion (icono del rostro de Cristo, enviado por el mismo Cristo, según la leyenda de Abgar, rey de Edesa) es un típico ejemplo, cercano quizá a la Sábana de Turín.
Acróstico (ákros-stíchon = inicio de verso): en el oficio bizantino, la frase compuesta por las primeras letras de cada tropario de un canon.
Addai y Mari [anáfora de]: anáfora siro-oriental del s. III, empleada por las tres ramas de los sirios orientales: nestorianos, caldeos y malabares (India). Parece que es la única compuesta en siríaco. Su estilo se caracteriza por el paralelismo propiamente semítico; es más simple y primitiva que las otras dos anáforas sirio-orientales (de Teodoro de Mopsuestia y de Nestorio). La ausencia de la narración de la institución no es originaria, según Botte, porque la anámnesis se articula naturalmente con la narración, que en Siria termina con las palabras: "Haced esto cada vez que os reunáis en mi nombre".
Agrypnía (= vigilia): celebración de una vigilia nocturna que, en el rito bizantino, precede al domingo y a la fiesta. Comprende las vísperas y el orthrós.
Áitésis (de aiteó = pido, solicito, demando): en la liturgia bizantina, la letanía de petición en la segunda parte de las vísperas, que termina con la palabra aithesómeta = pedimos. Se distingue de las ecténias.
Akáthistos (del akáthistos = no sentado; por tanto, de pie): es el poema mariano más célebre de la iglesia bizantina. Obra maestra de literatura y de teología. Las estrofas van alternando cuadros marianos y temas cristológicos, fundiendo a la vez el Hijo y la Madre. Está compuesto por un kontákion (himno breve) y de doce estrofas largas y doce cortas que concluyen con el aleluya. Autor anónimo, al parecer de finales del s. V. Se canta en parte los cuatro primeros sábados de cuaresma y completo el quinto sábado.
Akólythos (= compañero de viaje; acolitado), del que deriva akolythía (= rito, servicio litúrgico).
Alitúrgicos: son aquellos días en que no se celebra la eucaristía; en la liturgia romana son el viernes y sábado santos, y en la liturgia Ambrosiana, además, todos los viernes de cuaresma.
Ambón (de anabáinein = subir): béma. No confundirlo con el púlpito. El ambón es un lugar reservado para el anuncio de la palabra de Dios y el pregón pascual; puede también tenerse desde él la homilía y la oración de los fieles (OGMR 272).
Anabathmói (= subir): con este nombre se designa en el ámbito bizantino los salmos graduales (= Sal 119-133) o los de subida y los brevísimos troparios que se inspiran en éstos.
Anáfora (de anaphorá = llevar sobre, ofrecer): es la parte central de la liturgia eucarística, que va del prefacio a la doxología; sinónimo de plegaria eucarística (OGMR 54-55). Inicialmente designaba el pan para la ofrenda. Para los sirios indicaba el velo con el que, después de la consagración, se cubría el cáliz y la patena. Entendiendo la palabra en el sentido de "plegaria eucarística" en Oriente se recuerdan las a. de Addai y Mari; la de san Basilio (inicio del s. IV); la Clementina, de las Constituciones Apostólicas en el libro VIII, 5-15 (entre los siglos IV-V); la de Santiago (de ambiente antioqueno-jerosolimitano, ss. iv-v); la de san Marcos (ambiente egipcio, ss. v-vi). -> Eucaristía 734.
Anakefaláiosis (= recapitulación): en Ef 1,10. La recapitulación en Cristo significa su señorío sobre la historia y muestra la actuación de la economía salvífica.
Anamnesis (= memoria, conmemoración, recuerdo): parte de la plegaria eucarística que sigue a la narración de la institución o consagración, en la que se conmemora los grandes acontecimientos salvíficos. La iglesia, al recibir el encargo de Cristo, por medio de los apóstoles, realiza el memorial del mismo Cristo recordando principalmente su bienaventurada pasión, su gloriosa resurrección y ascensión al cielo (OGMR 55e). En el rito hispano se llama illatio. Su significado bíblico de actuación del acontecimiento pascual equivale al sinónimo de Memorial, Eucaristía.
Anargyroi (= sin plata, sin dinero): apelativo dado a los santos orientales Cosme y Damián, en cuanto, siendo médicos, ejercían gratuitamente su profesión.
Anástasis (= resurrección): con este nombre, Egeria define la zona oeste de la iglesia del santo sepulcro en Jerusalén, en la que se encuentra el sepulcro de Cristo. En aquel lugar, en la octava pascual, el obispo tenía las mistagogias dirigidas a los neófitos. Por extensión se aplicó el nombre también a otras basílicas de la antigüedad.
Anatolikón [sticherón]: serie de estiqueros del lucernario y de los laudes del domingo en el rito bizantino. Quizá de origen siropalestino, anterior al s. VII.
Anoixantária (= versículos de introducción): en el rito bizantino, los estribillos cantados con el Sal 103 con los que se inicia las vísperas.
Anthológion (= florilegio): libro litúrgico oriental que contiene elementos procedentes de otros oficios.
Antídoron (= don sustitutivo): en la liturgia bizantina el pan bendito que se distribuye después de la divina liturgia a los que no han recibido la eucaristía (don por excelencia).
Antimensio: paño de seda o de lino, parecido a unos corporales, adornado con imágenes de Cristo, en el que se hallan encerradas las reliquias de los mártires; sustituye al ara.
Apodéipnon (= después de la cena): en la liturgia griega, el oficio de la tarde correspondiente a las completas. Es el último de los siete oficios de la jornada.
Apódosis (= final): en la liturgia bizantina, el día de clausura de un período festivo.
Apólysis (= reenviar): en la liturgia bizantina, la despedida de la asamblea al terminar un oficio.
Apolytíkion (= tropario conclusivo): tropario cantado al final (apólysis) de las vísperas y del órthros, en las horas menores y en la santa liturgia después de la pequeña entrada.
Apósticha (= versículos intercalados): troparios intercalados en los salmos (por ejemplo, Sal 92 dominical) en la última parte de las vísperas. Cantados también en el órthros (matutino) en el día ferial.
Apóstolos: libro que contiene las pericopas de los escritos de los apóstoles que se leen en la liturgia bizantina.
Apótaksis (= separación): renuncia a Satanás. En ambiente monacal, la renuncia al mundo.
Aqaptha (= respuesta, réplica): en la liturgia siro-caldea, los dos versículos de un salmo recitado después de la salmodia; marmítha que se encuentra al inicio del qurbana.
Artoklásia (de árton = pan y klasis = partido): en el rito bizantino indica la "fracción de los panes". Es la ceremonia que se realiza al terminar el oficio de vísperas cuando le sigue una vigilia (agrypnía, pannychís). Consiste en una bendición de cinco panes y de una cantidad de grano, vino y aceite. El pan y vino se distribuyen durante el orthrós, cuando se venera el evangelio y el icono.
Artophórion (de árton = pan y féro = llevar): en la liturgia bizantina, el tabernáculo que custodia la eucaristía, que algunas veces puede tener la forma de paloma.
Asmatikós (= cantado): el oficio cantado de la liturgia de Constantinopla (= asmatikós akolythía), en oposición al oficio monástico; desapareció progresivamente a partir de los ss. XIII-XV.
Asterisco: en el ambiente latino, es un signo ortográfico, indicador de la pausa que se hace en medio de un versículo. Lo estableció Urbano VIII (1623-1644). En el rito bizantino es un aparato con cuatro pies, formado por dos semicírculos entrecruzados y unidos formando una especie de estrella, impidiendo que el velo que cubre el pan roce con el mismo.
Bathe: en la liturgia siro-caldea, las estrofas de un himno.
Bêma (= paso): en la basílica cristiana, el banco colocado a lo largo del ábside a los dos lados de la cátedra episcopal. Con la misma palabra en la iglesia bizantina se entiende el mismo presbiterio al que se entra por la puerta del iconostasio.
Canon: (de kánon = regla, norma fija): En el rito bizantino, composición poética subdividida en nueve odas, cada una con tres o cuatro troparios (la segunda oda se recita sólo en cuaresma desde el s. XI). El C. bizantino tiene como fuente la biblia: 1) primera oda: Cántico de Moisés (Ex 15,1-20); 2) Cántico de Moisés (Dt 32,1-44); 3) Cántico de Ana (1 Re 2,1-I1); 4) Cántico de Habacuc (Heb 3); 5) Cántico de Isaías (Is 26,9-21); 6) Cántico de Jonás (Jon 2,3-11); 7) Cántico de los tres jóvenes (Dan 3,26-57); 8) Himno de acción de gracias de los tres jóvenes (Dan 3,57-88); 9) Cántico de María y de Zacarías (Lc 1,46-55 y 67-79).
Catismas: las veinticuatro secciones en que se divide el salterio bizantino.
Cherúbikon: himno bizantino cantado durante la gran entrada o procesión de las ofrendas.
Chirothesia (= imposición de manos): en el ambiente bizantino es la imposición de manos unida a la colación de una dignidad eclesiástica, excluido el sacramento del orden.
Chirotonia (= extensión de la mano): la imposición de la mano para la consagración sacerdotal.
Ciclo (de kyklos = giratorio): período de tiempo que se vuelve a contar de nuevo. En el Año litúrgico, su completo desarrollo; en la Liturgia de las Horas, las veinticuatro horas del día.
Commixtio (= mezcla): la acción de introducir en el cáliz, que contiene el vino consagrado, un fragmento de la forma consagrada. Este rito antiquísimo tiene sus raíces en el del "fermentum", como signo de comunión con el obispo.
Communicatio in sacris (= comunicación en las cosas sagradas): en ambiente ecuménico "existe comunicación en las cosas sagradas cuando alguien participa en cualquier culto litúrgico o también en los sacramentos de cualquier iglesia o comunidad eclesial" (Directorium Oecumenicum 1,30; UR = Unitatis redimegratio 8).
Cordero: en la liturgia bizantina es la parte principal de uno de los cinco panes de la ofrenda (prosphora), que representa al Cordero de Dios. Esta parte del pan, de forma cuadrada o rectangular, lleva impreso las IC (= Jesús), XC (= Cristo), NI y KA (= vence); el primero (IC) se introduce en el cáliz en el momento de la fracción, mientras que los otros tres son utilizados para la comunión del sacerdote y de los ministros.
Crismón: medalla sobre la cual está inscrito el monograma de Cristo P y el binomio apocalíptico A y Omega.
Cuartodecimano: nombre dado a los cristianos de Oriente que en el s. II celebraban la pascua el día 14 de nisán (marzo), mientras que en Occidente se celebraba el domingo siguiente a la luna llena de primavera. Por esta diferencia se entabló la discusión sobre la celebración de la pascua. La disputa se acentuó en tiempos del papa Victorio I (189-199). La intervención de Ireneo de Lión (202) evitó el cisma. En este ambiente se inserta la homilía pascual del llamado Anónimo cuartodecimano.
Cusapa: en el rito siro-caldeo, la plegaria penitencial que recita en secreto el celebrante estando generalmente de rodillas.
Déesis (= intercesión): icono típico en el centro del iconostasio clásico, representando a Cristo Pantocrátor (= que todo contiene o domina), y a su derecha la Madre de Dios y a la izquierda el Bautista en actitud de súplica.
Diakonikón: en las iglesias orientales, el altar secundario de la derecha, junto al muro del ábside. Sobre él se colocan los ornamentos litúrgicos para los celebrantes.
Dikirotrikíra: en la liturgia bizantina, los pequeños candeleros que tienen incrustrados dos o tres velas. El obispo lo usa para bendecir, pues representan las dos naturalezas de Cristo y la Trinidad.
Diódion: canon.
Directaneus: tono recto, sin flexión, con que se canta un salmo, himno o cántico.
Dískos: patena en la liturgia bizantina.
Dogmatikón: theotókion del lucernario de las grandes y pequeñas vísperas del sábado tarde o de las fiestas (liturgia bizantina). Su nombre proviene de la fórmula dogmática continente que se refiere a la Madre de Dios y a la encarnación.
Doxastikón: tropario cantado después de la primera parte del Gloria al Padre (Doxa Patri), relacionado con el misterio de la Trinidad.
Doxología (de doxa = gloria + logos = palabra): fórmula litúrgica que glorifica a Dios. Se distinguen: a) la gran doxología que es el himno: Gloria a Dios en el cielo... (cantado en el oficio matutino primitivo); b) la pequeña d.: Gloria al Padre... (s. tv), recitado como conclusión trinitaria de muchas oraciones y de todos los salmos en la Liturgia de las Horas (cf OGLH 123, 124, 125); c) la parte conclusiva de la anáfora: Por Cristo...
Ecténias: oraciones orientales de intercesión en forma litánica, proclamadas por el diácono o por el sacerdote; la asamblea responde con la invocación Kyrie, eleison.
Eiréne pásin (= paz a todos): en el rito bizantino es el saludo inicial que el sacerdote dirige a la asamblea, la cual responde: Kaí tó pneúmati sou (y con tu espíritu).
Éisodos (= entrada): en el rito bizantino, la procesión de entrada en las vísperas de los domingos y de las fiestas, al terminar el lucernario, mientras se canta el theótokion dogmático; en la liturgia, además de la pequeña entrada, existe la gran entrada (ofertorio).
Ekphónesis: conclusión doxológica de una oración o letanía cantada por el celebrante (liturgia bizantina).
Embolismo (de embállo = añadir): oración que recoge y desarrolla una oración precedente. Un ejemplo es el Líbranos, Señor..., que sigue inmediatamente al Padrenuestro de la eucaristía y comenta desarrollando la última petición (... y líbranos del mal). También es une. la parte central y variable del prefacio.
Énarxis (= preludio): en la liturgia bizantina, la parte que va de la doxología inicial a la entrada de los ministros en el santuario.
Encénias (de egkainía = dedicación): fiesta que recuerda la reconsagración del altar y del templo de Jerusalén, después de la victoria de los Macabeos sobre los sirios en el año 165 a.C. Se celebraba hacia la mitad del mes de diciembre (cf Jn 10,22).
Encólpio: medallón pectoral, insignia del obispo griego (Panaghia).
Enkómia: son las lamentaciones y troparios del salmo 118 que forman parte del orthrós del sábado santo: es, pues, el elogio de Jesús cantado en el oficio del sábado santo delante de su sepulcro.
Eortología (de eorté = fiesta): el estudio del origen y de la historia de las fiestas y de los tiempos del año litúrgico.
Eothinón: el evangelio del orthrós. En domingo, el doxastikón de los laudes, que corresponde a uno de los once evangelios de la resurrección.
Epacta (de épaktos = añadido): es el número de días que en cualquier año tiene el día 1 de enero la lunación comenzada antes del mismo, pues el año solar excede en once días al lunar común de doce lunaciones, o sea, de trescientos cincuenta y cuatro días. La e. ayuda a determinar el novilunio de cada mes y en particular el de marzo, del que depende la datación de la pascua. Para encontrar la e. es necesario previamente conocer el número áureo.
Epano-kalamáfkion: lienzo negro muy ligero que rodea el kalamáfkion, que cae sobre las espaldas dividiéndose en tres partes.
Ephymnion: estribillo que se intercala entre los troparios del canon poético.
Epíclesis (de epikaléo = invocación): con la e. "la iglesia, por medio de determinadas invocaciones, implora el poder divino para que los dones que han presentado los hombres queden consagrados, es decir, se conviertan en el cuerpo y sangre de Cristo, y para que la víctima inmaculada que se recibe en la comunión sea para salvación de quienes la reciban" (OGMR 55c). De esta forma se mencionan los dos aspectos de la e. en la plegaria eucarística: 1) la transformación del pan y del vino, y 2) la santificación de la asamblea. Las oraciones de consagración también contienen una fórmula epiclética en la que se invoca la intervención especial del Espíritu Santo.
Epitáphios: en las iglesias orientales, el lienzo precioso que representa a Cristo en el sepulcro. Se lleva en procesión el viernes y sábado santos. Es adorado el viernes santo y se coloca sobre el altar para el oficio de medianoche antes de los maitines pascuales.
Ephitymía: la penitencia impuesta por el confesor por los pecados cometidos. Puede incluir también la exclusión de la comunión eucarística por un tiempo más o menos largo. Cuando dura más de un año se reserva al obispo y pide una fórmula especial antes de la absolución ordinaria.
Epitrachélion: en el rito bizantino, la larga estola del obispo o del sacerdote adornada con siete cruces.
Esperínon: las vísperas en la liturgia oriental.
Esychía-esicasmo (= silencio, tranquilidad de la mente y del cuerpo): método ascético oriental que busca la contemplación de Dios por medio de la paz del cuerpo y del alma. Interiorización y oración de corazón: cf Mt 6,5-6.
Etimasía (= preparación): la solemne representación simbólica del juicio final presidido por Cristo (es etoimasía tou thrónou = preparación del trono): un trono que termina con una cruz (o el monograma de Cristo). Ejemplos típicos son: el famoso sarcófago de Túsculo, en el mosaico de la cúpula del bautisterio de los ortodoxos en Rávena, y el arco triunfal de la basílica de Santa María la Mayor, mosaico que mandó hacer Sixto III (432-440).
Euchélaion (= óleo santo): la unción de los enfermos en la iglesia oriental.
Euchológhion: es el libro que contiene las oraciones para la sinaxis eucarística. Es famoso el de Serapión (t ca. 390). En Oriente es el libro fundamental por contener las oraciones presidenciales de las horas, el ordinario de la eucaristía, de los sacramentos, el oficio de los difundos, la profesión monástica, las consagraciones y las bendiciones. Corresponde al Sacramentario y a los Rituales latinos.
Eucología (de euché = oración, y lógos = palabra): "la ciencia que estudia las oraciones y las leyes que regulan su composición. En un sentido menos propio, el conjunto de oraciones contenidas en un formulario o en un libro litúrgico" (M. Angel).
Euloghetária (de euloghetós = bendito): se llaman así a dos series de troparios, uno dedicado a la resurrección y el otro a los difuntos; el nombre proviene de la primera palabra del estribillo: Benditos seas, oh Señor (cf Sal 118,12). El de la resurrección se canta en el orhtrós dominical como anuncio de la pascua semanal. Los dos últimos troparios están dedicados a la Theótokos y a la Trinidad. El triple aleluya en honor a la Trinidad concluye el canto del e.
Eulogía (= bendición): oración de bendición y, por tanto, sinónimo de la eucaristía. Luego se aplicó la palabra a los panes bendecidos pero no consagrados (antídoron) y a los demás objetos bendecidos y conservados por devoción.
Exapostilárion (nombre de origen incierto): es el tropario que precede a las alabanzas, después del canon del orthrós. Está en conexión con el tema de las alabanzas y del evangelio del orthrós y presenta con frecuencia el tema de la luz de Cristo.
Exaptérygon: especie de flabelos (abanicos de plumas de avestruz que acompañaban al Papa cuando iba en silla gestatoria) usados en el rito bizantino.
Exhomológhesis (= confesión): oración de alabanza y de adhesión a la voluntad divina y confesión de los pecados (cf 1 Jn 1,9; Sant 5,16).
Faldistorio (de Faltatuhi = silla plegable); asiento móvil sin respaldo, recubierto de un lienzo del color litúrgico del día, usado por el obispo en algunas celebraciones, sobre todo cuando falta la cátedra.
Familias litúrgicas: la diferenciación y polarización del núcleo litúrgico debido a hechos históricos, geográficos, culturales y lingüísticos, dando lugar a la formación de las diversas f.l. En Occidente podemos diferenciar las liturgias galicana, céltica, hispano-mozárabe, ambrosiana y romana; en Oriente, las familias antioquena y alexandrina.
Fermentum: era fragmento del pan eucarístico consagrado por el papa y llevado a los presbíteros titulares que no habían participado en la misa papal por tener que celebrar para sus fieles. Este fragmento introducido, en el cáliz en el momento del Pax Domini, era signo de comunión y de unidad con el papa.
Filantropía (= amigo de los hombres): uno de los atributos divinos más apreciados por la liturgia y la piedad oriental. Significa el amor de Dios al hombre.
Gazza: (= tesoro): libro litúrgico siro-oriental en el que se recogen las composiciones poéticas para las fiestas y las memorias de los santos.
G'hanta: (del rito siro-caldeo) oración pronunciada por el celebrante en el momento del Qurbana, en voz baja y de rodillas, con las manos extendidas y con las palmas mirando hacia arriba.
G'murtha: en el rito siro-caldeo, el pan consagrado.
Hághia (de ta hágia = las santas): es la puerta central del iconostasio que tiene dos hojas (de ahí el plural); se llama también real o del Paraíso. Está decorada con el icono de la Anunciación arriba (el ángel a la izquierda y la Virgen a la derecha, símbolo del Inicio de la salvación), con el icono de los cuatro evangelios abajo. Y encima está la déesis.
Haghiasma (= templo, sagrario): en el rito bizantino, el agua santa o la fuente decorada con el icono de un santo o de un misterio venerado (haghiasmatérion = agua santa). Es también un extracto del euchológhion.
Hagiográfica [lectura]: es el texto de algún padre o escritor eclesiástico que o bien habla directamente del santo cuya festividad se celebra o que se le puede aplicar rectamente, ya un fragmento de los escritos del santo en cuestión, ya la narración de su vida (cf OGLH 166), que se lee en el oficio de lectura.
Hebdomadario (de hebdomada = semana): el canónigo o monje o religioso que durante una semana se encarga de presidir el oficio o la misa capitolar o conventual.
Hexasalmo: el conjunto invariable de seis salmos (3, 37, 62, 87, 102, 142) recitados al inicio del orthrós.
Hieratikón (= sacerdotal): en el rito bizantino, el libro que contiene las oraciones del sacerdote o del diácono para el orthrós, las vísperas y liturgia.
Himnario: el libro que recoge los himnos para la liturgia de las Horas. El card. Tommasi publicó una colección, sirviéndose sobre todo del himnario manuscrito más antiguo que conocemos, el códice Reg. XI, de la Vaticana, redactado, según Wilmart, al principio del s. VIII. La colección de todos los textos poéticos medievales conocidos fue llevada a cabo por Dreves y Blume, Analecta hymnica medii aevi, con cincuenta y ocho volúmenes.
Himno de la tarde: uno de los más antiguos himnos lucernarios, atribuido al mártir Atenágoras, muerto hacia 169. En griego, phós hilarón; en latín, lumen hilare. Dirigido a Cristo (luz gozosa) y concluye con una doxología trinitaria.
Hipogonátion (= apoyo para las rodillas): es el pastoral del obispo para los bizantinos.
Hirmós (= seguido, concatenado): el primer tropario de cada oda del canon, empleado como modelo para otras estrofas.
Homophórion: en la liturgia bizantina, la larga cinta que el obispo lleva alrededor del cuello y que simboliza la oveja perdida que el buen pastor (Cristo) lleva al redil (iglesia).
Horológhion: libro litúrgico bizantino que contiene la parte ordinaria del oficio cotidiano con elementos sacados de otros libros litúrgicos como el Menáia, del Triódion, del Pentekostárion y otros formularios.
Hudri (= ciclo): libro litúrgico siro-oriental (caldeo) que contiene las más antiguas composiciones para todos los oficios festivos.
Hullalé: cada una de las veinte secciones en que se divide el salterio en la mayoría de los ritos orientales.
Huthama: en el rito oriental caldeo, la bendición final al despedir a los fieles al final del Qurbana.
Hypakoé (= escucha): tropario festivo y dominical.
Hypapante (= encuentro): es el nombre griego de la fiesta de la presentación del Señor en el templo (2 de febrero). Conocida ya a finales del s. IV en Jerusalén; en el s. VII estaba difundida por toda la cristiandad.
Icono (= imagen): pintura sagrada, frecuentemente portátil, pintada sobre una madera siguiendo una técnica especial transmitida secularmente en Oriente. La teología del icono arranca de la contemplación del misterio de la encarnación, expresado en el texto de la carta Col 1,15: "Cristo es imagen (=icono) de Dios invisible", y termina siendo una teología visiva, una teofanía: "Cuando el evangelio se expresa en palabras, el icono lo proclama con los colores y lo hace presente a nosotros".
Iconoclasta (= destrucción de las imágenes): se dice del hereje que negaba, con violencia y radicalmente, el culto debido a las sagradas imágenes, destruyéndolas y persiguiendo a quienes las veneraban. Fueron condenados en el concilio ecuménico de Nicea en 787.
Iconóstasio: la parte que divide el santuario del espacio reservado a la asamblea, recubierta de iconos y con tres puertas, una grande y dos pequeñas.
Idiomelo: el tropario cantado según una melodía, a diferencia del prosómoion, que es cantado con un ritmo y una melodía común a otros troparios.
I. H. S.: las tres primeras letras de la palabra griega Jesús en la traducción latina. La transcripción de la H llevó a la siguiente grafía equivocada de Ihsus y la artificiosa interpretación: I = lesus, H = Hominum (o Hierosolymae) y S = Salvator (= Jesús salvador de los hombres).
Ikos (de oikós = estrofa, copla): estrofa del kontákion.
Improperios (de improperare = reprochar): durante la solemne adoración de la cruz en el viernes santo se cantan los improperios que el Crucificado parece dirigir al pueblo elegido; la asamblea responde con el Trisaghion: Hágios o Theós (=santo es Dios), Hágios lschyrós (=santo y fuerte), Hágios Athánatos (=santo e inmortal), ten piedad de nosotros. Provienen del ambiente jerosolimitano (s. VI) y se introdujeron en el ambiente galicano. El texto se encuentra por primera vez en el Pontifical de Prudencio de Troyes (s. IX).
Incienso (en gr. thimiama): es el símbolo de la oración como aparece en el Sal 140,2: "Se eleva mi oración ante ti como incienso..." En el Oriente cristiano se usó pronto el i.; Occidente, en cambio, lo introduce en la liturgia en los ss. IX-X.
Kalamáfkion: especie de sombrero, color negro y en forma cilíndrica, usado por los bizantinos (excepto Rusia).
Karozutha: en el rito siro-caldeo, la proclamación realizada por el diácono.
Kashkull (= contiene todo): libro litúrgico siro-caldeo, que, a diferencia del Hudrá, contiene todos los textos para el oficio ferial.
Katamerós: el leccionario en la liturgia copta.
Katabasía (de katahasía = descenso, bajada): en el rito bizantino, nombre dado al kirmós, cuando, en los días festivos, se canta nuevamente al final de las odas o del canon, mientras los dos coros descienden para unirse en el centro y cantar juntos.
Kathísma (de kathízó = estoy sentado): con esta palabra se indican las partes del oficio durante las cuales se está sentado, y también cada una de las veinte secciones en que está dividido el salterio bizantino para ser leído en forma continua en las vísperas y en el orthrós.
Katholikós (= universal): título dado desde finales del s. IV a algunos obispos de algunas iglesias procedentes del patriarcado de Antioquía, a saber: los obispos de Seleucia-Ctesifonte, de Armenia y de Georgia. Actualmente existen dos katholikói católicos, el armeno y el caldeo (siro-jacobita).
Kénosis (de kénosis = acción de vaciar, de despojar de todo): expresa el abajamiento de Cristo cantado en el himno de Flp 2,7: "Cristo se anonadó así mismo tomando la naturaleza de siervo, haciéndose semejante a los hombres". El Hijo de Dios, encarnándose, se despojó de su gloria hasta hacerse "irreconocible" (cf Is 53,2-3). La k. es el modo propiamente divino de amar. Existe también la k. del Espíritu en la iglesia.
Kérygma (de keryssó = anuncio, proclamación): es el núcleo esencial del mensaje evangélico, anunciado por mandato divino a la iglesia.
Koinonía (= comunión): palabra frecuente en los escritos de Pablo y de Juan; indica la comunión entre las personas de la Trinidad y, por participación, la que une la iglesia (cf 1 Cor 1,9; 1 Jn 1,1-4).
Kóluba: dulce confeccionado con flor de trigo, fruta confitada y azúcar, que se ofrece en el ámbito bizantino en honor de un santo o de un difunto.
Kontákion (de kontós = himno breve): antiquísima composición poética (s. v-vi). Himno compuesto de estrofas isosilábicas, o por lo menos isorrítmicas, cantadas todas según el mismo ritmo, con un estribillo cantado por el pueblo; el himno va precedido cada vez de un preludio y se termina con una oración. La liturgia bizantina ha conservado el k. con sus estrofas después de la sexta oda del orthrós festivo. El compositor más célebre de los k. fue Román el Cantor (s. VI). El célebre himno Akáthistos es un k.
Kusapi: en el rito siro-caldeo, la oración secreta dicha por el celebrante.
Letanía (de litanéia = oración pública de súplica): súplicas populares dialogadas entre el diacono y el pueblo, que responde una breve invocación; con frecuencia acompañan una procesión. En el rito bizantino se distingue la colecta (sunapté) de las ecténias y la plegaria de petición (áitésis). En la lit. latina son famosas las letanías de los santos, y la devoción mariana ha creado la letanía lauretana (de Loreto). El Kyrie, eleison es una letanía.
Lité (= súplica): en el rito bizantino, la gran oración de súplica que se hace durante la procesión de las vísperas. Se compone de peticiones en favor del pueblo y del mundo entero.
Liturgia (del griego léiton érgon = obra popular): hoy significa el culto público e integral del cuerpo místico, Cabeza y miembros (cf SC 7). En la iglesia griega tiene un sentido más restringido: significa la eucaristía (= la divina liturgia).
Liturgia [griega de Santiago]: es un Ordinarium Missae completo con los ritos y las fórmulas con ella relacionados, que representa probablemente el antiguo rito litúrgico de Antioquía y Jerusalén. El testimonio más antiguo se encuentra en un canon (32) del concilio de Trullano (692); pero ciertamente se celebraba mucho antes. La celebran hoy los griegos una sola vez al año, en la fiesta de Santiago (23 de octubre), en Jerusalén, Chipre y alguna otra iglesia.
Lucernario (de lychnikón = lucernarium): en el rito bizantino es el oficio de la tarde, cuya parte central comprende los salmos 140, 141, 129, 116, con cuadro a diez estiqueros intercalados, el doxastikón, el theotókion, el éisodos y el himno de la tarde. Para los primeros cristianos era el rito con el que se saludaba a la luz, símbolo de Cristo, luz eterna e indefectible. Desapareció en el s. IV, a excepción de la laus cerei (= el exsultet pascual); sin embargo, se ha conservado en la liturgia ambrosiana.
Lumen hilare: himno, recordado por san Basilio (f 379), que los cristianos recitaban para saludar al primer destello de la luz al atardecer.
Lumi santi (de hágia phóta = luces santas): nombre griego de la epifanía en cuanto conmemoración de la luz traída por Cristo y manifestada por él en el bautismo.
Maphriano (= consagrador): en la jerarquía de la iglesia jacobita es el título que se da al que ocupa el cargo después del katholikós. Hoy el m. es el vicario general y asistente del katholikós.
Marmítha: en el rito siro-caldeo es la subdivisión del salterio en dos o en tres sesiones.
Maronita: rama estrechamente emparentada con el rito siro-antioqueno, del que constituye una derivación. El rito m. halla su origen en las comunidades agrupadas alrededor de los monasterios de Siria central, y ante todo del que se había desarrollado sobre la tumba de un asceta de principios del s. V, Mar Marón.
Mediante die festo, in: en el rito bizantino es la fiesta que recuerda el día 25 después de pascua, que se celebra el miércoles entre la cuarta y quinta semanas después de pascua. La fiesta se fundamenta en el texto de Jn 7,14-30.
Megalinario (de megalynó=magnífico): retornelo de los troparios de la novena oda del canon, que inicia con la primera palabra del Magníficat.
Melisma (de mélisma = canto): en el canto gregoriano, la sucesión más o menos larga de notas melódicas sobre una misma sílaba o vocal.
Menáia (= meses): en el rito bizantino, la colección de 12 volúmenes (uno por mes) que contiene día por día los oficios de las fiestas fijas del Señor, de la Virgen María y de los santos.
Menológhion: nombre dado al sinaxario; colectar noticias para las fiestas del Señor, de la Virgen María y de los santos.
Mesonyktikón (= medianoche): oficio bizantino de medianoche.
Mesórion: en el rito bizantino, la duplicación de las horas menores del oficio en los días penitenciales.
Metánoia (= cambio de mentalidad): mencionada en la const. apost. Paenitemini, de Pablo VI (17-2-1966) cuando dice: "Ad Christi Regnum nobis fas est accedere tantum metanoia". La m. se describe como "intima totius hominis mutatione, qua ipse cogitare, iudicare vitamque suam componere incipit ea sanetitate et caritate Dei perculsus, quae in Filio novissime manifestatae sunt et plene nobis impertitae" (EDIL 611). En los ritos orientales la m. es una inclinación o una postración realizada en signo de humildad y adoración.
Misa de presantificados: en el rito bizantino se celebra la m.d.p. los días cuaresmales; se comulga con el pan consagrado en una celebración eucarística anterior. La liturgia romana sólo celebra la m.d.p. el viernes santo.
Myróforos (portador de ungüento): las mujeres que fueron al sepulcro la mañana del primer día de la semana para ungir el cuerpo de Jesús (cf Lc 24,1).
Myron: en Oriente es el óleo santo consagrado por el patriarca o por el obispo para el sacramento de la confirmación y la consagración del altar.
Neófitos (de neóphytos = neonato): así se llaman los neobautizados por haber nacido a la nueva vida de la fe. Es el tiempo de la mistagogia.
Neomenia (de neomenía = nueva luna): la fiesta del novilunio.
Odas (de odái = cantos): en el rito bizantino son: 1) los cánticos bíblicos del orthrós, 2) el conjunto de troparios poéticos del canon.
Ogdóada: es la semana de ocho días, símbolo de eternidad, porque el número ocho trasciende la semana e indica el día escatológico. Además, el octavo día que sigue al séptimo (= sábado) es el domingo, día de la resurrección del Señor (1 Ts 5,2-10). Por la relación existente entre la resurrección del Señor en el octavo día y la celebración del bautismo, muchos baptisterios antiguos son octogonales (por ejemplo, el de San Juan de Letrán, el de Santa Sofía en Constantinopla, etc.).
Oikós: ikos.
Októechos: en el rito bizantino, el libro litúrgico de los ocho tonos. Contiene los textos poéticos para las vísperas, el oficio nocturno, el orthrós y la liturgia dominical e infrasemanal. Los textos están repartidos para ocho semanas, según los ocho tonos musicales.
Onitha: en la liturgia siro-caldea, el canto antifonal alternativo. Existen varias antífonas, a saber: la onitha de Bem, antífona antes de la comunión de los fieles; la onitha de Quanke, antífona después de la salmodia al inicio del Qurbana; la onitha de Rase, antífona ofertorial; la onitha del Evanghelion, canto antifonal después del evangelio, acompañado procesionalmente por los fieles mientras se conducen a los catecúmenos a la salida de la iglesia.
Orarion: en los ritos orientales, la estola diaconal, adornada con tres cruces.
Orthrós (= aurora): para los bizantinos es el oficio del amanecer. Tiene un esquema diverso y mucho más amplio que el oficio del rito romano. En los días en que se celebra la eucaristía se une a ella. Con las vísperas son los dos momentos fuertes del culto cristiano cotidiano.
Panaghía (de pan-haghía = toda santa): es el título honorífico que la iglesia bizantina atribuye a la Madre de Dios. Por derivación, también se llama p. al pan bendecido en su honor y al medallón con la efigie de la Virgen llevada por el obispo (también Encólpio).
Panegyrikón: homiliario bizantino que contiene las homilías de los padres y las narraciones hagiográficas para ser leídas durante el oficio o en el comedor monacal.
Panichída: el oficio fúnebre en el rito bizantino eslavo.
Pannychís (= la noche entera): la vela o vigilia litúrgica que se prolonga toda la noche. Se practica todavía hoy en algunos monasterios bizantinos. En Oriente, la vigilia pascual es la p. por excelencia.
Pantokrátor (= todopoderoso, omnipotente): en el arte oriental es la representación más frecuente de Cristo. Se representa su figura entera, como en muchos ábsides, sentado en el trono y bendiciendo. Más frecuentemente se representa sólo de medio cuerpo, enmarcado dentro de un círculo, con la derecha levantada en signo de bendecir y de autoridad y con la izquierda mostrando el libro de los evangelios.
Paráklisis: es el pequeño oficio en honor de la Virgen María, que se canta todas las tardes del 1 al 14 de agosto en preparación a la fiesta de la dormición o de la asunción en el rito bizantino.
Paraklitikí (de parakletiké = consolación): otro nombre dado al októechos, en cuanto contiene los cantos propios de exhortación y consolación.
Paramonia (de paramoné = permanencia): la palabra significa permanecer largo tiempo en un mismo lugar, como sucede en el rito bizantino en las tres grandes vigilias de las solemnidades de navidad, epifanía y pascua.
Parástasis: en la liturgia bizantina, el oficio de difuntos.
Parimía (de paroimía = proverbio, parábola): nombre que se da a las lecturas de las vísperas en el rito bizantino.
Parusía (de parousía = presencia, venida): retorno de Cristo al final de los tiempos (cf 1 Tes 2,19; 3,13; 5,23). En la liturgia la p. es la tercera dimensión: cada acción litúrgica es memorial de la acción de Jesús histórico, celebración en el hoy yen espera del retorno de Cristo.
Pentekostárion: nombre que se da en la liturgia bizantina al libro que contiene lo propio del período que va de pascua a penfecostés y el estiquero del salmo 50 para el orthrós.
Perícopa (de peri-kóptó = corte alrededor): pasaje que puede ser recortado dentro de un libro o capítulo de la biblia.
Phós hilarón: himno de la tarde.
Pixide (de púxis = caja): copón en el que se guardan las formas consagradas.
Potérion: el cáliz en la lengua griega.
Preorté (De pró-eorté = antes de la fiesta): el día precedente a una fiesta.
Presantificados: misa de los presantificados.
Prokímenon (de prokéimenon = puesto delante): en el actual oficio bizantino, el versículo sálmico proclamado antes de la lectura bíblica y que ofrece una clave interpretativa de la lectura a la luz del misterio del día.
Proskomidía: preparación de las ofrendas en la liturgia bizantina.
Proskynesis: postración o inclinación en signo de adoración.
Prosómion: tropario sin melodía propia, cantado con la melodía de otro tropario.
Prosphorá (= oblación): en el rito bizantino, el pan del que se extraen las partículas para ser consagradas.
Próthesis: en el rito bizantino, la pequeña mesa colocada en el ábside menor, al lado norte, destinada a la preparación de las ofrendas y consumación de las santas especies después de la liturgia.
Protóclito (de prótos-kaléó = llamado antes): título honorífico concedido a san Andrés por haber sido el primero que Cristo llamó (cf Jn 1,40), así como san Esteban es el protomártir.
Psycopómpo (de psyché + pémpo = acompañar el alma: así se denomina al arcángel Gabriel, porque la iconografía cristiana lo representa acompañando a las almas al cielo.
Puertas reales: hághía.
Qanoná: en el rito sirio-caldeo, la aclamación doxológica proclamada en voz alta por el celebrante.
Quddasa: en el rito siro-caldeo, la consagración, la anáfora.
Quilla: en el rito siro-caldeo, una especie de aclamación diaconal.
Qurbana (= ofrenda): en el rito siro-malabar significa la plegaria eucarística.
Sinergia (de syn-érgon = co-acción): la colaboración nacida de la unidad de energías. En los padres, la palabra intenta presentar la novedad de la unión de Dios y del hombre en Jesucristo mediante el Espíritu Santo. La s. del Espíritu Santo y de la iglesia es una noción clave para comprender el misterio de la liturgia (J. Corbon).
Sphraghís (= sello): era la señal con la que el amo marcaba a personas y animales de su propiedad. En la liturgia sacramental indica el carácter peculiar que imprimen en el alma los sacramentos del bautismo, confirmación y orden.
Stasis (de stásis = estación, pausa): en el rito bizantino, las s. son las sesenta antífonas que dividen las veinticuatro catismas del Salterio bizantino.
Stauróforo (de stáuros-féró = portador de la cruz): el que lleva la cruz en las procesiones.
Staurotheotokíon: un theotókion con alusiones a la cruz: la Madre de Dios al pie de la cruz; se recita los miércoles y los viernes.
Stichéros (de sticherón = versículo): el tropario intercalado entre los versículos de los salmos del lucernario y de los laudes (liturgia bizantina).
Sticologia: 1) lectura contínua versículo a versículo del salterio, un catisma para vísperas y tres para el orthrós. Se trata de una costumbre bizantina monacal, omitida en las parroquias; 2) lectura de los versículos de un salmo intercalados por los troparios, los sticheros o apostichos.
Surraya: en el rito siro-caldeo, el canto compuesto por un salmo o parte del mismo, después de la segunda lectura del AT.
Synapté (= colecta): letanía diaconal al principio de las vísperas, del orthrós y de la eucaristía (liturgia bizantina).
Synaxario (de synaxárion = recoger): en la iglesia griega recoge un breve elogio hagiográfico del santo de cada día del año para el oficio divino. Designa también el typikón.
Synáxis (de synáxis = reunión): la asamblea, la reunión litúrgica para una celebración.
Teándrico-teandrismo (de Théos + anér = Dios-hombre): con estas palabras se indica la unión de la naturaleza divina con la humana en la única persona de Cristo. La liturgia es una realidad teándrica por excelencia porque al celebrar la iglesia (cuerpo) los misterios Cristo (cabeza) está presente.
Theotókion: Tropario en honor de la Madre de Dios (= Theotókos).
Theotókos (= Madre de Dios): es el título dado a María en el concilio de Efeso (431).
Triadikón: Tropario en honor de la Trinidad o el canon triádico en el oficio nocturno del domingo.
Triódion (= de tres odas): canon que comprende tres odas, rezado los lunes y viernes de cuaresma. Se llama también así el libro de la cuaresma (cf Pentekostárion).
Trisághion (= tres veces santo): la triple aclamación Santo Dios, santo fuerte y santo inmortal, ten piedad de nosotros que se encuentra en la liturgia eucarística oriental al inicio de la liturgia de la palabra, en la pequeña entrada. Esta aclamación, sacada de Is 6,3, inicialmente cristológica y presente en las actas del concilio de Calcedonia (451), se amplió luego dándole un sentido trinitario. Se menciona en los improperios del viernes santo mientras se adora la cruz.
Tropario (de trópos = modo, forma o tono): composición poética de variable duración, cuyo ritmo se fundamenta sobre el acento tónico. Los más antiguos se remontan al s. V. Estos formaron luego parte de las sucesivas composiciones litúrgicas de los kontákia, de los iki y de los cánones. Con frecuencia el t. es el desarrollo de una antífona sálmica.
Tropos (de trópos, entendido como desarrollo armónico): texto breve que durante la edad media se interpolaba en un texto litúrgico, bien aprovechando una frase musical sin letra en el canto o bien dotándole de melodía propia.
Turgama: en el rito siro-caldeo, el himno cantado antes de la epístola y del evangelio.
Thymiatérion: incensario.
Typiká: en la liturgia bizantina, el grupo formado por los salmos 102, 145 y las bienaventuranzas (Mt 5,3-12). Precede a la pequeña entrada, sustituyendo a las tres antífonas. El oficio de los t. es de origen palestinense; era un oficio de comunión para los días alitúrgicos (como los presantificados en cuaresma, de origen constantinopolitano).
Typikón: en el rito griego es el libro litúrgico que contiene las ceremonias y rúbricas. También se llama así, por extensión, el reglamento de un monasterio.
Ypakoé: tropario propio para los domingos y los días de gran fiesta. El sentido de la palabra es incierto (quizá deriva de akoúó = escuchar) y expresa una invitación a prestar atención en la lectura y en la escucha.
Zéon: en el rito bizantino, el agua caliente que se mezcla con el vino en el cáliz después de la inmixtión, mientras el sacerdote dice: "Fervor en la fe y lleno del Espíritu Santo". Nicolás Cabasilas ve en este acto el descender del Espíritu Santo sobre la iglesia.
Zummara: en el rito siro-caldeo, el canto compuesto de salmos que se canta después de la epístola.