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Jueves, 21 de noviembre de 2024

Sandro Botticelli, Sandro

De Enciclopedia Católica

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Fue un famoso pintor florentino. Nació en Florencia alrededor de 1447; murió en la misma ciudad, en 1510. Su nombre en realidad era Allesandro di Mariano Filipepi, siendo su padre Mariano Filipepi, pero se le llama así debido a que fue aprendiz del pintor y artesano del oro, Botticelli. Más tarde fue pupilo de Fray Filippo Lippi y aprendió de su maestro a pintar en la forma ideal de Fray Angélico. A través de la influencia de Verocchio y los hermanos Pollajuoli este idealismo se sumó a la naturalidad de Masaccio. Estas cualidades explican la gran influencia de Botticelli sobre pintores que le siguen. La vida de Botticelli fue muy privada y en su mayor parte bajo circunstancias muy modestas. Sin embargo, sabemos que fue empleado por los Médicis y otras familias florentinas prominentes aproximadamente entre 1483 a 1500. Aunque nunca se inclinó por la frivolidad recibió influencia del espíritu mundano de la era hasta que el poderoso llamado de Savoranola al arrepentimiento hizo surgir su naturaleza moral y guió su energía hacia, lo que parece ahora, caminos totalmente nuevos. Nunca supo cómo cuidar el dinero y murió finalmente en la pobreza. Botticelli era demasiado modesto para firmar y fechar sus trabajos en la mayoría de los casos, por lo que el orden cronológico de sus pinturas debe juzgarse por los lienzos mismos.

1. Madonnas

Botticelli goza por encima de todo, una reputación ganada a pulso como pintor de la Madonna. En estas imágenes la fascinación descansa más en la expresión de la Madre y el Hijo y en la mirada de los rostros de los querubines varones a medio crecer que en la natural sencillez de la pose y composición. Dos de estas pinturas, de forma circular (llamadas tondo, que quiere decir redondas) se han hecho muy famosas. Ambas están en Florencia; una es el "Magnificat", y en el otro el Niño sostiene una granada. Un lienzo circular en Berlín que muestra a la Madonna en el trono y rodeada por ángeles que llevan velas, es caracterizado por un profundo sentimiento religioso. Un número de pinturas pequeñas de la Madonna recuerda a Fray Filippo; otras de tono más severo parecen mostrar la influencia de Verocchio. La expresión del Niño es siempre dulce y encantadora, sin embargo también pensativa, y en ocasiones es una de intensa seriedad. La Madre refrena con santa reverencia su ternura y parece tener un presentimiento de futura pena. Este sentimiento de melancolía pronosticada también se expresa en los ángeles y santos que le sirven. Una pintura de esta Madonna entronizada, con los dos Juanes está en Berlín; dos lienzos en Florencia muestran a la misma Madonna rodeada por numerosos santos. Es obvio que la mirada de melancolía en el rostro de la Madre de Dios tenía una extraña atracción para el pintor. Su autorretrato en la "Destrucción de Core, Dathan y Abiron" muestra su inclinación natural a la intensa seriedad, y en los "Desterrados" ha reflejado la más profunda pena.


2. Sujetos Bíblicos

En 1481 el Papa Sixto IV llamó a comparecer a Roma a Botticelli, junto con otros pintores, para que redecoraran la nueva Capilla Sixtina. Según el biógrafo Visari, hasta debía supervisar toda la obra. Botticelli pintó en la capilla tres frescos que representaban hechos en las vidas de Moisés y de Cristo. Se unen por lo menos siete escenas en la "Vida del Joven Moisés" por lo que la composición carece de unidad. Indudablemente el artista trabajó bajo un sentimiento de limitación. La composición está animada en algunas partes y tiene la intención de provocar sentimientos. La "Destrucción de Core, Dathan y Abiron" está representada en tres escenas. La figura de Moisés aparece aquí con toda la majestad concedida por Dios para el castigo de los rebeldes. Aquí hay una interesante relación entre esta pintura y el "Otorgamiento de las Llaves a Pedro" en el muro opuesto. Moisés en todo su poder es la contraparte de Pedro, a quien se le han confiado las llaves del cielo. Por arriba del fresco sobre la prueba del joven Moisés, Botticelli pintó del Nuevo Testamento la "Tentación de Cristo". El Papa tiene frente a sí esta pintura mientras está sentado en la celebración de la Misa. Extrañamente, el plano frontal de la pintura representa la purificación de un leproso ante una compañía de eclesiásticos y dignatarios seculares y asimismo contiene una alusión al Papa. La explicación de la escena es como sigue: Moisés tuvo que pasar pruebas antes de llegar a ser el líder de su pueblo, al igual que el Salvador tuvo que sufrir con el fin de sanar a la humanidad de la lepra del pecado, al igual que el Papa con el fin de llevar a cabo las misiones de Cristo. Como una alegoría indicadora de esto, la pintura muestra un hospital construido por Sixto IV. Debe reconocerse que el pintor ejecutó la difícil tarea que le fue asignada en la capilla con asombrosa habilidad. Sintiendo la importancia de esta obra, Botticelli llevó a cabo sus diseños casi enteramente por sí mismo; los más pequeños detalles muestran las infinitas dificultades que se tomó. Es estos frescos dio gran espacio a la arquitectura romana, estableciendo así un buen ejemplo de trabajo a los pintores que venían después de él. Pueden hacerse otras menciones acerca de las pinturas bíblicas de Botticelli mencionando el "Nacimiento de Cristo", cuya intención era que fuese una obra en memoria de Savonarola. En esta pintura, mientras que un coro de ángeles alaba a Dios arriba del pesebre, tres ángeles guían abajo a monjes dominicos hacia el Salvador, Cristo, quien había sido proclamado por Savonarola como rey de la ciudad de Florencia. Tenemos también una "Adoración de los Magos" en cuatro ejemplos (Florencia, Londres y San Petersburgo.) Este lienzo está lleno de figuras y tiene un fondo compuesto por arquitectura y paisajes soberbios. La copia en Florencia es famosa por los retratos de los Médicis que contiene, que fueron incluidos según la costumbre de la época. Botticelli produjo dos ejemplos de la "Lamentación de Cristo" en alrededor del año 1500, que están ahora en Munich y Milán. En esta composición la expresión de pena es profunda pero suavizada.


3. Retratos

Entre los veinticuatro retratos de Papas en la Capilla Sixtina, cinco son de Botticelli. En la Iglesia de Ognissanti (N. Del T.: Todos los Santos) en Florencia existe una pintura célebre de San Agustín por Botticelli que está frente a San Agustín, por Ghirlandajo. Existen dos retratos de Giuliano de Médicis y un excelente retrato de una mujer en Francfort.

4. Otros Temas

En la "Celebración de una boda" Botticelli pintó en la villa de Tornabuoni cerca de Fiesole, una escena alegórica representando las Siete Artes y Virtudes rindiendo homenaje a la pareja recién casada. Entre sus pinturas mitológicas se puede mencionar la "Venus", que navega en una concha hacia una isla que ha elegido como hogar.

Otro tema mitológico es "Venus y Marte". Botticelli contribuyó en "Fortaleza" y "Primavera" al estilo alegórico de pintura tan popular en sus días. La "Columna de Apelles", que es de ejecución realista, es esencialmente alegórica.

Muy relacionadas con estas obras están más de noventa ilustraciones para la "Divina Comedia" de Dante, que ha estimulado la imaginación de tantos pintores, desde Giotto hasta Miguel Ángel. Cuatro lienzos en color parecen indicar la intención de llevar a cabo toda la obra en la misma forma después de haber trazado con pluma y lápiz los diseños. La mayoría de las pinturas son apenas delineados o bosquejados. Sin embargo, son de admirarse y formaron una de las principales ocupaciones de los últimos años del pintor. La fidelidad a la naturaleza en el trazado de la figura humana, la expresión contemplativa de los rostros, la dramática animación de la acción y la habilidosa colocación de la perspectiva hace que estos diseños sean un último triunfo de Botticelli.

G. GIETMANN Transcrito por Suzanne Plaisted Traducido por Lucía Lessan