La Última Cena en el Arte virreinal peruano, y su correcta interpretación
De Enciclopedia Católica
A pesar de que el relato evangélico nos indica con precisión que lo acontecido en el Cenáculo fue un encuentro muy privado entre Cristo y los que amaba, sin embargo, vemos una gran cantidad de personas y curiosos. Además, el pintor sugiere que van a ocurrir otros sucesos cercanos en el tiempo inmediato.
Separemos, entonces, los elementos que por motivos pedagógicos juntó el pintor, y que nosotros separaremos para mejor comprensión.
Comencemos fijando la vista únicamente en los protagonistas del relato evangélico: Cristo y los Doce.
A) Vemos ahí celabración de la Pascua figurativa representada en el cordero de la bandeja)
B) Los tres candelabros significan la Conglorificación Trinitaria .[1]
C) La Celebración de la Pascua Eterna, indicada por el ofrecimiento que Cristo hace de su Cuerpo y de su Sangre en los accidentes de pan y vino.
D) El brazo de Cristo levantado al cielo nos indica que la Sagrada Eucaritía ha sido instituida, y que el Sacrificio ha sido aceptado por Dios Padre. [2]
E) Cristo, Luz del mundo, está colocado en medio , entre la Lámpara de los Profetas y el Faro de los Doctores de la Iglesia: hablando litúrgicamente, alegorizan “el Lado de la Epístola” y el “Lado de la Evangelio”. Completan el sentido de la Mesa conformados por el <<Pan de Vida>> y el <<Pan de la Palabra>>.
F) Hasta las angustias del Sagrado Corazón de Jesús han sido representadas ahí: cuando anuncia que uno de ellos lo va a entregar, Juan se reclina sobre su pecho, y es el único que pudo escuchar los latidos de su angustiado corazón. Mientras tanto, un taimado Judas se lleva la mano al pecho para burlarse de Cristo: ¿Acaso seré yo Señor? La maldad ya inspira y mueve todos los actos de Judas; los demonios, como ladrones a la espera del momento, observan por las ventanas para tentar al resto de los apóstoles. Por que esa noche, todos serían tentados, cada cual a su tiempo.
No puede ser un cuy por varios motivos: el primero y más importante, porque sería un elemento disturbador de la finalidad pedagógica, que era modélica; es decir, no se dejaba al arbitrio o capricho del artista; en segundo lugar porque la censura inquisitorial las hubiese destruido; y en tercer lugar por iconografía universal comparada. Es un corderito lechal.