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Viernes, 1 de agosto de 2025

Diferencia entre revisiones de «Providencia de Dios, Arquitectura Sacra Simbólica , Restauración del Centro Histórico de Lima, y el Papado de León XIV»

De Enciclopedia Católica

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El día de su exaltación al Señorío Apostólico, lo primero que apareció ante los ojos de León XIV fue la Cruz Victoriosa. Clavada sobre el obelisco de granito rojo, que  Calígula colocó en el Circo del Tirano Nerón.  Había sido traído de Egipto. Desde la Ciudad de Heliópolis.
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==Contexto Eclesial==
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El día de su exaltación al Señorío Apostólico, lo primero que apareció ante los ojos de León XIV fue la '''Cruz Victoriosa'''. Clavada sobre el obelisco de granito rojo que  Calígula colocó en el Circo del Tirano Nerón.  Había sido traído de Egipto. Desde la '''Ciudad de Heliópolis'''.
  
En su primera Homilia  el Señor Apostólico dijo:  <<Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios vivo, es decir, el único Salvador y el que nos revela el rostro del Padre. En Él Dios, para hacerse cercano a los hombres, se ha revelado a nosotros en los ojos confiados de un niño, en la mente inquieta de un joven, en los rasgos maduros de un hombre (cf. Concilio Vaticano II, Const. pastoral Gaudium et spes, 22), hasta aparecerse a los suyos, después de la resurrección, con su cuerpo glorioso. Nos ha mostrado así un modelo de humanidad santa que todos podemos imitar, junto con la promesa de un destino eterno que, sin embargo, supera todos nuestros límites y capacidades.>> [...]
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En su primera Homilia  '''Pro Eclessia''' el Señor Apostólico dijo:  <<Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios vivo, es decir, el único Salvador y el que nos revela el rostro del Padre. En Él Dios, para hacerse cercano a los hombres, se ha revelado a nosotros en los ojos confiados de un niño, en la mente inquieta de un joven, en los rasgos maduros de un hombre (cf. Concilio Vaticano II, Const. pastoral Gaudium et spes, 22), hasta aparecerse a los suyos, después de la resurrección, con su cuerpo glorioso. Nos ha mostrado así un modelo de humanidad santa que todos podemos imitar, junto con la promesa de un destino eterno que, sin embargo, supera todos nuestros límites y capacidades.>> [...]
  
 
Dijo  que había sido elegido [...] en favor de todo el Cuerpo místico de la Iglesia; de modo que esta sea cada vez más la ciudad puesta sobre el monte (cf. Ap 21,10), arca de salvación que navega a través de las mareas de la historia, faro que ilumina las noches del mundo. Y esto no tanto gracias a la magnificencia de sus estructuras y a la grandiosidad de sus construcciones —como los monumentos en los que nos encontramos—, sino por la santidad de sus miembros, de ese «pueblo adquirido para anunciar las maravillas de aquel que los llamó de las tinieblas a su admirable luz» (1 P 2,9).
 
Dijo  que había sido elegido [...] en favor de todo el Cuerpo místico de la Iglesia; de modo que esta sea cada vez más la ciudad puesta sobre el monte (cf. Ap 21,10), arca de salvación que navega a través de las mareas de la historia, faro que ilumina las noches del mundo. Y esto no tanto gracias a la magnificencia de sus estructuras y a la grandiosidad de sus construcciones —como los monumentos en los que nos encontramos—, sino por la santidad de sus miembros, de ese «pueblo adquirido para anunciar las maravillas de aquel que los llamó de las tinieblas a su admirable luz» (1 P 2,9).
  
Saludó a su antigua diócesis, y la Iglesia en el Perú con estas palabras: Saludo en modo particular a mi querida diócesis de Chiclayo en el Perú, '''donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe, y ha dado tanto, tanto, para seguir siendo Iglesia fiel de Jesucristo'''>>
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El día de su elección, envió un breve mensaje '''Pro Patria'''
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Saludó a su antigua diócesis, y la Iglesia en el Perú con estas palabras: "Saludo en modo particular a mi querida diócesis de Chiclayo en el Perú, '''donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe, y ha dado tanto, tanto, para seguir siendo Iglesia fiel de Jesucristo''' ""
  
  

Revisión de 03:46 29 jul 2025

Contexto Eclesial

El día de su exaltación al Señorío Apostólico, lo primero que apareció ante los ojos de León XIV fue la Cruz Victoriosa. Clavada sobre el obelisco de granito rojo que Calígula colocó en el Circo del Tirano Nerón. Había sido traído de Egipto. Desde la Ciudad de Heliópolis.

En su primera Homilia Pro Eclessia el Señor Apostólico dijo: <<Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios vivo, es decir, el único Salvador y el que nos revela el rostro del Padre. En Él Dios, para hacerse cercano a los hombres, se ha revelado a nosotros en los ojos confiados de un niño, en la mente inquieta de un joven, en los rasgos maduros de un hombre (cf. Concilio Vaticano II, Const. pastoral Gaudium et spes, 22), hasta aparecerse a los suyos, después de la resurrección, con su cuerpo glorioso. Nos ha mostrado así un modelo de humanidad santa que todos podemos imitar, junto con la promesa de un destino eterno que, sin embargo, supera todos nuestros límites y capacidades.>> [...]

Dijo que había sido elegido [...] en favor de todo el Cuerpo místico de la Iglesia; de modo que esta sea cada vez más la ciudad puesta sobre el monte (cf. Ap 21,10), arca de salvación que navega a través de las mareas de la historia, faro que ilumina las noches del mundo. Y esto no tanto gracias a la magnificencia de sus estructuras y a la grandiosidad de sus construcciones —como los monumentos en los que nos encontramos—, sino por la santidad de sus miembros, de ese «pueblo adquirido para anunciar las maravillas de aquel que los llamó de las tinieblas a su admirable luz» (1 P 2,9).

El día de su elección, envió un breve mensaje Pro Patria

Saludó a su antigua diócesis, y la Iglesia en el Perú con estas palabras: "Saludo en modo particular a mi querida diócesis de Chiclayo en el Perú, donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe, y ha dado tanto, tanto, para seguir siendo Iglesia fiel de Jesucristo ""



Ante la presencia del Niño Jesús refvugiado en Egipto, enmudecieron para siempre sus oráculos y sus ídolos. La Sagrada Familia tuvo su asiento en Heliópolis, la Ciudad de Sol. Estando en Heliópolis, el Divino Infant e obró Maravillas. Fue ahí donde donde se hizo manifiesta su santidad y su divinidad.