Diferencia entre revisiones de «Abside»

Revisión de 17:51 14 dic 2006

(Lat., ápside o absis, Gr., Iónico., ápside, un arco).

Se trata de la terminación semicircular o poligonal al coro o pasillos de una iglesia. Una terminación similar a veces se construye al “transepts” y nave. El término en arquitectura eclesiástica generalmente denota esa parte de la iglesia donde el clero se sienta o está colocado el altar. Se llamó así por el hecho de ser normalmente abovedado, y fue utilizado de tal manera por griegos y romanos.

El término a veces se aplica a un dosel encima de un altar; un domo; el tejado arqueado de un cuarto; el asiento del obispo en iglesias viejas; un relicario; un hueco, semicircular, lo que cubre encima de una bóveda en la forma de un semi-domo o cualquier otra descripción de tejado. El ábside siempre es sólido debajo aunque generalmente tiene ventanas anteriores. El chevet es un ábside, siempre acompañado de una pantalla abierta de columnas en la planta baja, y abriéndose en un pasillo que de nuevo se abre en tres o las capillas más absidales.

A veces el ábside es un semicírculo simple; fuera de esto, en algunas iglesias grandes, un semicírculo más pequeño salta, similar a la corona de Becket en Canterbury, y como en las iglesias en Sens, Langres, y muchos otros en Europa. A veces el coro termina con tres ábsides al pasillo central y uno a cada pasillo lateral, como en Autun. A veces el plan es un semicírculo, cada bahía tiene un ábside semicircular proyectando, formando una clase de racimo de ábsides, como en Beauvais, Troyes, Giras, etc. El coro más actual en Le Mans es abrazado por no menos de trece ábsides, el central es dos veces la profundidad de los otros, formando la Capilla de la Nuestra Señora.

Los ábsides redondos y poligonales grandes, generalmente tienen como radiando capillas dentro de ellos, como en la Abadía de Westminster. El término ábside fue acostumbrado primero en referencia a una basílica romana de la que era un rasgo característico. Había un ábside en el templo de Marte Ultor. Ahora esta deteriorado, pero en el tiempo de Sabaco y Paladio, parecía que habían suficientes restos como para haber justificado un esfuerzo restaurador. Es casi cuadrado (aproximadamente de 37 por 40 metros).

El cela aquí es una parte mucho más importante lo que es usual en templos griegos, y termina en un ábside que después se transformó en algo característico de todos los lugares de culto. En la basílica de Trajan estaba en un extremo, un gran ábside semicircular, la parte de atrás que se levantó, se encontraba junto a un rango semicircular de pasos. En el centro de esta plataforma se levantó el asiento del magistrado que presidía. En cada lado, los lugares eran para los asesores u otros que participaban en que las actividades se llevaran a cabo. Delante del ábside se colocó un altar, donde se realizó un sacrificio, antes de comenzar alguna actividad pública importante.

En la basílica, cuando usó como un lugar de culto cristiano, aproximadamente en el cuarto siglo, la congregación entera de creyentes, se podía encontrar y participaba en ceremonias y devociones. El obispo tomaba su lugar; lo mismo que los presbíteros, los lugares de los asesores. Se requirió muy pocos cambios para erigir un altar cristiano en la parte adelante del ábside, donde el pagano había realizado sus libaciones al comienzo y conclusión de toda actividad importante.

La basílica pagana se convirtió en la “eclesia”, o lugar de asamblea de la comunidad cristiana más antigua. En la iglesia de Ibrihm, en Nubia, existe peculiarmente, un ábside interior que llegó a ser generalizado en Oriente, pero menos frecuente en iglesias occidentales. Otro ejemplo para hacer esta forma temprana inteligible, es el de la iglesia de San Reparato, Orléansville cercano en Argelia, el antiguo Castellum Tingitanum.

Según una inscripción que todavía existe, tal construcción se erigió en 252; pero el segundo ábside parece haber sido agregado aproximadamente en el año 403, para contener la tumba del santo. Como él ahora las posiciones se conforman por un doble ábside en la basílica, 18 metros de largo por 17 metros de ancho. La división era en cinco pasillos, exhibiendo en una balanza de miniatura, todas las peculiaridades de plan que nosotros pensamos que no se adoptarían sino siglos después.

En este caso ambos ábsides son interiores, para que los pasillos laterales sean más largos que el central; al parecer ninguna porción de ellos había sido definida para sacristías, como se hacía muy a menudo en esos tiempos. En Parenzo, Istria, hay una basílica construida en el año 542, con tres pasillos y un ábside al final de cada uno. La iglesia en Torcello, cerca de Venecia, presenta uno de los mejores ejemplos respecto a montajes de ábside, y da una idea mejor del modo en el que originalmente se colocaron los ábsides de iglesias; algo que puede ser encontrado en cualquier otra iglesia de esos tiempos o de épocas más tempranas.

El ábside en la capilla de San Quinide, probablemente del noveno o décimo siglo, es la parte más peculiar y más antigua de la iglesia, y se forma de una manera original. Externamente, se trata de dos lados de un cuadrado; internamente, un semicírculo; a cada ángulo del exterior y en cada cara se haya una pilastra imitada del orden corintio. La misma se apoya en un entabladura, lo que puede confundirse con construcciones antiguas del norte, o bien con templos paganos.

El plan de la iglesia en Planes, merece ser citado, si no por su mérito, por lo menos por su singularidad; es un triángulo con un ábside atado a cada lado, apoyando una parte redonda que termina en un tejado llano. Como un enigma constructivo es curioso, pero es dudoso situar alguna utilidad de esa formación extraña. La iglesia de Ste-Croix en Majour de Mont Arles es una iglesia de tres ábsides; se suponía que iba a ser la única de su tipo. Construida como una capilla sepulcral, tiene una construcción obscura, pero apropiada. En el estilo bizantino el ábside se retuvo, como en St. Sophia en Constantinopla, en las iglesias bizantinas viejas en Ravenna, y en varias iglesias en el Rin.

El ábside casi se adopta universalmente en Alemania, y es muy común en Francia e Italia. En partes diferentes de Inglaterra hay muchas iglesias con ábsides semicirculares al extremo oriental, principalmente en el estilo Normando, y algunos en los que esta forma se ha alterado evidentemente en períodos subsecuentes. En varios casos las criptas bajas ha retenido la forma, mientas que la superestructura se ha alterado.

El ábside es virtualmente un rasgo continental y contrasta con la terminación cuadrada de trabajo gótico inglés. El ábside semicircular tradicional, grandemente aumentado y en estilo perfeccionado, cambió a un plan poligonal. Es la terminación oriental más característica de las iglesias francesas grandes. El ábside de Romanesque bajo, cubrió con el semi-domo primitivo y adjuntó con su pared simple, no presentando dificultades constructivas, sin producir efectos imponentes.

El “chevet” francés en voladura, con su muchos “celled” en la bóveda, sus historias del “arcaded”, sus pasillos rodeando, y sus capillas radiales; hace que se puedan extasiar los ojos del espectador. El ábside de San Germain-des-Prés (segundo cuarto del Siglo XII) puede considerarse razonablemente como el primer gran ábside gótico que se construyó. La catedral de Norwich es quizás el ejemplo más fino del ábside redondo en Inglaterra.

La catedral de Durham, cuya nave y coro se terminaron casi como se ven ahora, en una construcción desde el Siglo XII, tenía un ábside originalmente; pero a causa de un defecto en la albañilería esto se bajó y la magnífica capilla actual de los Nueve Altares data del Siglo XIII. La forma absidal se encuentra de vez en cuando en Inglaterra, como a Lichfield y Westminster.

Hay un ábside en cada brazo de las transversales en las iglesias en Melbourne, Gloucester, Ramsay, Chichester, Chester, Norwich, Lindisfarne, Iglesia de Cristo en Hants, Tewkesbury, Castillo Acre, Evesham. Si el transversal fuera largo, debería de tener dos ábsides en cada brazo, como en Cluny, Canterbury, San Agustín, y San Albano.

FERGUSSON, A History of Architecture in all Countries (Londres 1893), GWILT, Encyclopedia of Architecture (Londres 1881); FLETCHER, A History of Architecture (Londres, New York, 1896), WEALE, Dict. of Terms in Rudimentary Series (Londres, 1859-93); MOORE, Development and Character of Gothic Architecture (Londres, New York, 1899); LONGFELLOW (ed.). A Cyclopedia of Works of Architecture in Italy, Greece and the Levant (New York, 1895).

THOMAS H. POOLE Transcripción de las Monjas Dominicas de Clausura, del Monasterio del Niño Jesús, Lufkin, Texas.

Traducción al castellano de Giovanni E. Reyes Dedicado a la Gloria de Dios