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Historiador y misionero dominico nacido en Zaragoza, España en 1566. Murió en Nueva Segovia, Filipinas en el año 1635. Estudio en la Universidad de Alcalá y entro en la Orden de los Predicadores. En 1594 zarpo hacia Las Filipinas en compañía de otros miembros de la Orden, llegando a Manila en 1595. Fray Diego destacaba de entre los misioneros, aun cuando se encontraba entre quienes fueron verdaderos héroes apostólicos en el tiempo que les toco compartir juntos. Al principio se concentro en la difícil tarea de catequizar a los residentes chinos de Las Filipinas, obteniendo un éxito inesperado con ellos. Al poco tiempo se le selecciono como uno de los dos misioneros dominicos que acompañarían a una expedición militar que pretendía brindar apoyo al gobernador de Cambay, quien era originario de aquel lugar. Después de un tortuoso viaje que duro mas de un año, llegaron a las inmediaciones de lo que hoy conocemos como Tailandia, (N.T.) solo para enterarse de lo infructuoso que había sido su esfuerzo, pues habían llegado demasiado tarde; además de quedarles claro que sus vidas corrían peligro ante la actitud hostil mostrada por los nativos del lugar. Partieron pues, y llegaron a la Cochinchina, (lo que hoy llamaríamos Vietnam meridional, N.T.) con el propósito de evangelizar a los paganos, pero la resistencia feroz de los lugareños les obligo a retirarse.

Los misioneros dominicos insistieron en viajes similares al anteriormente descrito, tanto por tierra como por mar, algunos de los cuales duraron meses y otros hasta años. Fue durante estas incursiones por Oriente que Fray Diego se contagio de fiebres, paso hambres y sed en mas de alguna ocasión. Sin embargo, no hubo obstáculo que le hiciera vacilar de su propósito que no era otro que difundir la luz del Evangelio y de la Santa Fe.

En 1603 regreso de la Cochinchina a Manila y de allí partió para España, buscando así proteger la posición de la Orden en las islas y no perjudicar La Misión debido a una serie de incidentes que sucedieron en el lugar. Después de pasar dos años reclutando a los misioneros idóneos, zarpo con rumbo a Las Filipinas en 1605. A estas alturas de la historia, Fray Diego llevaba consigo los nombramientos de Prior del convento dominico, otorgado en 1595, y el de Rector de la Universidad Santo Tomas. Regreso a España en 1695 para fungir como procurador en un asunto interno de la Orden y, es en este periodo de tiempo cuando empieza a redactar la historia o sucesión de hechos históricos que le toco presenciar en la provincia de la Orden en Las Filipinas; obra esta considerada de gran valor por los historiadores, ya que ha sido designada como material de consulta obligada para lograr comprender las relaciones Estado-Iglesia en las islas, durante los inicios de la presencia de los españoles en Oriente.

Los escritos de Fray Diego F. Aduarte son testimonio fiel de los innumerables frenos con los que se topaban los misioneros frente a la actitud codiciosa y rapaz que mostraban los españoles en la región. Sus obras principales son Relación de muchos cristianos que han decidido por la fe católica en el Japón desde el año 1616 hasta el de 1628 (Manila, 1632, 1640); Relación de algunas entradas que han hecho los religiosos de la Orden de Predicadores en la provincia del Santo Rosario (Manila, 1638); Historia de la provincia del Santísimo Rosario de Filipinas, Japón y China (Manila, 1640 y Zaragoza, 1693); Relación de los gloriosos martirios de seis religiosos de San Domingo de la provincia del Santo Rosario (Manila, 1634; Valladolid, 1637), que conforman un compendio que además de curioso resulta poco común.

TOURON, Hist. Des hommes illustres de l'ordre de S. Dominique, s.v.; DICE, Enciclop. Hispano-Americana, s.v.; BLAIR AND ROBERTSON, Collection of Documents relating to the Philippine Islands (vols. XXX-XXXII).

M.S. WELSH
Traduccion: Cecilia Nieto B. Mexico