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Viernes, 19 de abril de 2024

Diferencia entre revisiones de «Studia Limensia Anexo X: Simbolismos de la pintura funeraria de la cripta de la cofradía de indiosde la Virgen del Rosario»

De Enciclopedia Católica

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Las obras de restauración de la fachada de la iglesia de santo Domingo de Lima, actualmente en ejecución, incluyen la restitución del muro pretil. Esto permite devolver su definición prístina a este espacio sagrado, trayendo a la memoria sus antiguos espacios sepulcrales, hasta hoy olvidados. El cementerio, o campo santo también recibe el nombre de  dormitorio, porque así como los fieles vivieron unidos a la luz del Evangelio, están unidos sus cadáveres en la muerte, unidas sus cenizas en el mismo dormitorio, pues todos han de despertar del sueño de la muerte, en el día de la resurrección. Se fabricó este  cementerio junto a la Iglesia para que los que pasaran, se acordaran que habían de morir, y pidieran al Señor por los muertos por medio de los sufragios de Virgen del Rosario, a cuya honra y veneración se construyó esta basílica para mayor gloria de Dios. Las obras ejecutadas por Pro Lima descubrieron la cripta sepulcral de la cofradía de indios de la Virgen del Rosario, donde están inhumados miembros de la nobleza incaica, y presumiblemente  Beatriz Clara Coya. En su interior hay una pintura mural, de vivísimos colores, con una representación calvarista. El mensaje es simple y dramático: Inculcar en los cofrades el horror al pecado. Porque la esclavitud del pecado, lleva a la muerte, ya que la paga que deja el pecado es la muerte, a diferencia del regalo dado por Dios, que es la vida eterna, como dice san Pablo a los Romanos. En la pintura mural, no aparece Cristo, sino el lienzo con el que se descendió; es decir, el Señor ya se encuentra en el sepulcro. Transmite un mensaje de esperanza, del mismo san Pablo: Si morimos con Cristo, resucitaremos con Él. Esta Cruz, es la misma que vendrá por estandarte real el día del Juicio Final.
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'''José Gálvez Krüger'''
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'''Sociedad Peruana de Historia'''

Revisión de 02:47 30 ene 2023

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Las obras de restauración de la fachada de la iglesia de santo Domingo de Lima, actualmente en ejecución, incluyen la restitución del muro pretil. Esto permite devolver su definición prístina a este espacio sagrado, trayendo a la memoria sus antiguos espacios sepulcrales, hasta hoy olvidados. El cementerio, o campo santo también recibe el nombre de dormitorio, porque así como los fieles vivieron unidos a la luz del Evangelio, están unidos sus cadáveres en la muerte, unidas sus cenizas en el mismo dormitorio, pues todos han de despertar del sueño de la muerte, en el día de la resurrección. Se fabricó este cementerio junto a la Iglesia para que los que pasaran, se acordaran que habían de morir, y pidieran al Señor por los muertos por medio de los sufragios de Virgen del Rosario, a cuya honra y veneración se construyó esta basílica para mayor gloria de Dios. Las obras ejecutadas por Pro Lima descubrieron la cripta sepulcral de la cofradía de indios de la Virgen del Rosario, donde están inhumados miembros de la nobleza incaica, y presumiblemente Beatriz Clara Coya. En su interior hay una pintura mural, de vivísimos colores, con una representación calvarista. El mensaje es simple y dramático: Inculcar en los cofrades el horror al pecado. Porque la esclavitud del pecado, lleva a la muerte, ya que la paga que deja el pecado es la muerte, a diferencia del regalo dado por Dios, que es la vida eterna, como dice san Pablo a los Romanos. En la pintura mural, no aparece Cristo, sino el lienzo con el que se descendió; es decir, el Señor ya se encuentra en el sepulcro. Transmite un mensaje de esperanza, del mismo san Pablo: Si morimos con Cristo, resucitaremos con Él. Esta Cruz, es la misma que vendrá por estandarte real el día del Juicio Final.

José Gálvez Krüger

Sociedad Peruana de Historia