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Jueves, 28 de marzo de 2024

Diferencia entre revisiones de «Simbolismos de la retablística de los órganos barrocos, en el contexto de la Cardiomorfosis»

De Enciclopedia Católica

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La arquitectura religiosa barroca , mediante planos, formas, volúmenes, luces, sombras y decoraciones materializa simbólicamente realidades sobrenaturales y misteriosas. En la Iglesia todo habla de Dios, todo remite a Dios, toodo celebra y bendice Su [[Misericordia]], pero también proclama su Justicia
 
La arquitectura religiosa barroca , mediante planos, formas, volúmenes, luces, sombras y decoraciones materializa simbólicamente realidades sobrenaturales y misteriosas. En la Iglesia todo habla de Dios, todo remite a Dios, toodo celebra y bendice Su [[Misericordia]], pero también proclama su Justicia

Revisión de 03:56 16 jul 2019

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La arquitectura religiosa barroca , mediante planos, formas, volúmenes, luces, sombras y decoraciones materializa simbólicamente realidades sobrenaturales y misteriosas. En la Iglesia todo habla de Dios, todo remite a Dios, toodo celebra y bendice Su Misericordia, pero también proclama su Justicia

La Iglesia material presenta escenográficamente la Prefiguración celestial, nos invita a entrever e imaginar las delicias de la Gloria que nos espera y que debemos alcanzar. Estamos en el ámbito de la "composición de lugar ignaciana".

La planta de en forma de cruz latina remite al concepto corporal; Cristo es la cabeza, el Corazón de María es el corazón de la Iglesia, y nosotros los miembros de ese Cuerpo Místico.

Las iglesias Barrocas nos hablan de la Iglesia Triumpahnte (el altar Mayor y los retablos, donde esta el Trono del Santísimo sacramento, los altares laterales con los campeones de la santidad, del martirio y de la caridad). También nos habla de la Iglesia Purgante, simbolizada en los sepulcros que están debajo de los altares, desde el cual se derrama la Misericordia que las purifica, Nos habla, igualmente de la Iglesia Militante, que asiste al Sacrificio a comer el Pan Eucarístico y Pan Evangélico, alimentos que dan la vida: <<Tu palabra me da vida, confío en ti Señor>> <<El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna, y yo le resucitaré el último día.Porque mi carne es verdadera comida y mi sangre verdadera bebida.El que come mi carne y bebe mi sangre, permanece en mí, y yo en él.>>

Hasta aquí la Misericordia pero ¿que nos habla de la Justicia?


Siempre desierta curiosidad la monumentalidad, el lujo y el emplazamiento de los órganos. Por lo general, los órganos están opuestos al Altar Mayor, pero en alto. Los coros catedralicios estaban igualmente opuestos, pero con simbolismo distinto, y al ras del suelo. El coro, situado en el plano ideal del cuerpo que tiene a Cristo como cabeza, represente a la Creación toda, que es el escabel de los pies de Dios, que se congrega para Cantarle Gloria y Alabanza.

El filósofo español Donoso Cortés dice: <<Todo en Dios es razonable: su justicia como su bondad, y su bondad como su misericordia; como quiera que si es infinitamente justo, e infinitamente bueno, e infinitamente misericordioso, es razonable también infinitamente. De donde se sigue que no es posible atribuir a Dios, sin blasfemia, ni una bondad, ni una misericordia, ni una justicia, que no tenga sus fundamentos en la soberana razón, la cual solamente hace que la bondad sea verdadera bondad, y la misericordia verdadera misericordia, y la justicia justicia verdadera>>.

Por tanto si arquitectónicamente la iglesia material proclama la Misericordia de Dios y a Cristo que perdona 70 veces 7, simbolizados en el Altar y las Criptas de enterramiento, por fuerza no puede estar ausente el rigor de su Justicia en alguna parte de la edificación.

La alturas de los retablos antiguos proclaman la Grandeza de la Gloria de Dios, la Grandeza de su Misericordia y la Bienaventuranza eterna para los buenos. Sabemos que hasta en los infiernos se doblan las rodillas ante el nombre de Cristo; sabemos que los demonios también creen, pero tiemblan, y sabemos que Satanás tentó a Cristo para que se postrara ante Él y lo adorara y Sabemos que Satanás encadena al mundo con las cadenas del pecado.

Las grandes dimensiones y belleza exterior del mueble que cobija al instrumento, deben ser entendidas como predicativas de la Justicia; o sea, Perfecta, Hermosa y Terrible. Es predicativa, también, de los júbilos de la Iglesia en Triumpho, de las alabanzas de todos los coros angélicos. Por tanto, inevitablemente supone la derrota y la prisión del demonio y de sus servidores. Los tubos y las cañuterías, dispuestas como están parece,n los barrotes de una prisión. El demonio y los suyos se odian a sì mismos, se odian entre ellos y blasfeman.

Su Mayor tormento es asistir (ideal y arquitectónicamente) al Triumpho de la Eucaristía y oír a la Iglesia cantar Gloria y Alabanza. Si Cristo expulso una Legión de demonios y la encerró en una piara de cerdos, la divina liturgia los encierra en una prisión material y musical, que los veja, los atormenta y los confunde.Las puertas también los atormentan: cuando se cierran ven a quien lo arrojó al abismo y a quien le quebró la cabeza: El Ángel más obediente y la Virgen Gloriosa y Bendita, el Rey David, Tubal y Santa Cecelia.

Los Santos Ángeles son exaltados y los demonios vituperados y ridiculizados. No hay nada de extraño que esto ocurra: la alegría y el gozo de la alabanza aplastan a quien causó las lágrimas de la Humanidad rntera y las hasta de Cristo mismo. Así vemos que el padre de la Mentira es aplastado por la Cátedra de la Verdad y el Inmundo es aplastado por la Fuente de Pureza.

La Cruz es una llave maestra que Abrió el Cielo, para los puros, abre las puertas del Purgatorio para los purificados y cierra candados del Infierno. El organito precedente lo sintetiza a la perfección, si lo asociamos a los emblemas y a las cruces braquiales de las pinturas

José Gálvez Krüger (EL Perú)

[[Heriberto Raymundo Moreno Baeza (México)