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Sábado, 20 de abril de 2024

Diferencia entre revisiones de «Matteo da Siena»

De Enciclopedia Católica

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(Matteo di Giovanni di Bartolo) Pintor, nacido en Borgo, San Pepolcro, aproximadamente en 1435; murió en 1495. Su nombre se haya asociado al hecho de haber trabajado fundamentalmente en la ciudad de Siena. En el Siglo XIV, los maestros de la escuela sienense rivalizaron con los pintores florentinos. En el Siglo XV, la escuela de Siena quedó un tanto rezagada ante los avances de los florentinos.
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(Matteo di Giovanni di Bartolo) Pintor, nació en [[Borgo San Sepulcro]], aproximadamente en 1435; murió en 1495. Su apelativo común se deriva del hecho de haber trabajado principalmente en la ciudad de Siena. En el siglo XIV los maestros de la escuela sienesa rivalizaron con los pintores florentinos; en el siglo XV la antigua  escuela resistiéndose al progreso logrado en [[Florencia]],  se permitió quedar  rezagada ante sus rivales. Aunque en ese período da la impresión de ser un arte anticuado, la [[pintura]] sienesa aún cautiva con sus líneas sobrevivientes, sus cualidades tradicionales---su sinceridad de sentimiento, la refinada gracia de sus figuras, la atención a los detalles en las vestimentas y de trasfondo arquitectónico (v. [[arquitectura]]), así como su fascinante franqueza en la ejecución.  En todas estas cualidades, Mateo tiene su parte, sin embargo es  más distinguido por la dignidad de sus figuras femeninas, la graciosa presencia de los [[ángeles]] y la [[armonía]] de un  esquema de color rico y brillante a la misma vez.  Por estas razones los críticos lo declaran el mejor pintor sienés del Siglo XV.
En los tiempos actuales, la pintura de la escuela sienense aún conserva su encanto en medio de sus cualidades tradicionales, la sinceridad del sentimiento, la refinada gracia de las figuras, la atención a los detalles de vestimentas y los fondos arquitectónicos, así como la fascinante franqueza en la ejecución de las obras.
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El primer trabajo auténtico de Mateo data de 1470:  una Virgen entronizada, con ángeles, pintada para los servitas, la cual se halla en la Academia de Siena.  En 1487 realizó para el altar mayor de Santa María de Servi del Borgo---la iglesia servita de su aldea nativa--- una “Asunción”, con  los Apóstoles y otros santos como espectadores; en la predela pintó la historia de la Santísima Virgen.  Según G. Milanesi (en su edición de Vasari II, Florencia, 1878, p. 493, nota 3) la parte principal  de esta pintura aún puede verse en la iglesia,  mientras que las porciones laterales fueron trasladadas a la sacristía. Algunas de sus otras Madonas merecen mención particular: una en el Palacio Tolomeo en Siena, la Virgen con el Niño Jesús pintados,  en 1484 para el palacio de la ciudad de Siena,  sobre una pilastra en el  salón decorado por Spinello Aretino; en el domo de Pienza, la Virgen y el Niño entronizados entre San Mateo y Santa Catalina, San Bartolomé y San Lucas.  En la luneta, Mateo pinto la Flagelación, y sobre la predela, tres medallones---“Ecce Homo”, la Virgen y un Evangelista. La  rúbrica indica: "Opus Mathei Johannis de Senis". Como  decoración en el pavimento de la Catedral de Siena, diseñó tres sujetos: la “Sibila de  Samos”, el “rescate de Betulia”, y la “Masacre de los Inocentes”. 
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En 1477 pintó su “Madonna de la Nieve” (Nuestra Señora de las Nieves) para la iglesia bajo dicha advocación en  Siena.  Al compararla con la Madonna servita de 1470, se ve que sobrepasa al trabajo anterior en la belleza de los tipos, la simetría de las proporciones, y en los tonos de los colores.  La Santa Bárbara, una composición hecha para la Iglesia de Santo Domingo en Siena, es también un trabajo sobresaliente: dos ángeles le colocan  una corona sobre la cabeza a la  santa, mientras que otros, acompañados por Santa María Magdalena y Santa Catalina de Alejandría y tocando instrumentos,  la rodean. Cuando Mateo trata temas que  involucran acción animada,  pierde bastante de su poder artístico.  Las escenas incidentales están combinadas de una manera confusa, la expresión de sentimiento es forzada y degenera en mueca; el resultado final es afectado y caricaturesco.  
  
En todas estas cualidades, Mateo tiene brinda sus aportes. Sin embargo aparece como más distinguido por sus figuras femeninas, la gracia en la presencia de los ángeles y la armonía de los esquemas de color, que son a la vez muestran riqueza y brillantez. Por estas razones los críticos le consideran el mejor pintor sienense del Siglo XV.
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Fuente: Sortais, Gaston. "Matteo da Sienna." The Catholic Encyclopedia. Vol. 10. New York: Robert Appleton Company, 1911.  
 
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Transcrito por Joseph P. Thomas, En  Memoria de Mrs. Joe G. Nolan   Traducido al español por Giovanni E. Reyes.  Revisado y corregido por Luz María Hernández Medina
El trabajo más temprano que se conocer de Mateo data de 1470, es una Virgen entronada, con ángeles. La obra se encuentra ahora en la Academia de Siena. En 1487 ejecutó para el altar mayor de Santa María de Servi del Borgo, la iglesia de su aldea nativa, una “Asunción”, en la cual los Apóstoles y otros santos se muestran expectantes. Mateo pintó la historia de la Santísima Virgen.
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De conformidad con G. Milanesi (en su edición de Vasari II, Florencia, 1878, p. 493, nota 3) la principal porción de esta pintura, aún puede verse en la iglesia, mientras que las porciones laterales han sido trasladadas a la sacristía. Algunas de sus otras Madonas merecen mención particular: una en el Palacio Tolomeo en Siena, la Virgen con el Niño Jesús, pintada en 1484 para la ciudad de Siena, la que se encuentra en una pilastra del salón principal el que fue decorado por Spinello Aretino. En el domo de Pienza, una Virgen con el Niño entronizados entre San Mateo y Santa Catalina, San Bartolomé y San Lucas.
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En la luneta, Mateo pinto la flagelación, y en la predela, tres medallones –“Ecce Homo”, la Virgen, y un Evangelista. La inscripción indica: "Opus Mathei Johannis de Senis". Como elementos decorativos en el pavimento de la Catedral de Siena, diseñó tres sujetos: la “Sibila de los Samos”, la “Entrega de Bethania”, y la “Masacre de los Inocentes”.  
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En 1477 pintó su “Madonna de la Nieve” en la iglesia bajo la invocación del Siena. Al comparar esta obra con la Servite Madonna de 1470, se ve que la primera de las mencionadas sobrepasa al trabajo realizado con anterioridad en la belleza de los tipos, simetría de proporciones, así como en colores y tonalidades. La Santa Bárbara, una composición hecha para la Iglesia de Santo Domingo en Siena, es también un trabajo sobresaliente: dos ángeles hacen descender una corona sobre la cabeza del santo, mientras que otros acompañados por Santa María Magdalena y Santa Catalina de Alejandría, tocan instrumentos y rodean la escena principal. Cuando Mateo trata sujetos en movimiento, pierde bastante de su poder artístico.
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Las escenas incidentales están combinadas de una manera confusa, la expresión de sentimiento es forzada y aparece como degenerar; el resultado final aparece con rasgos de caricatura.
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GASTON SORTAIS
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Transcrito por Joseph P. Thomas  
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E n Memoria de Mrs. Joe G. Nolan  
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Traducido al español por Giovanni E. Reyes
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Revisión de 21:15 3 sep 2008

(Matteo di Giovanni di Bartolo) Pintor, nació en Borgo San Sepulcro, aproximadamente en 1435; murió en 1495. Su apelativo común se deriva del hecho de haber trabajado principalmente en la ciudad de Siena. En el siglo XIV los maestros de la escuela sienesa rivalizaron con los pintores florentinos; en el siglo XV la antigua escuela resistiéndose al progreso logrado en Florencia, se permitió quedar rezagada ante sus rivales. Aunque en ese período da la impresión de ser un arte anticuado, la pintura sienesa aún cautiva con sus líneas sobrevivientes, sus cualidades tradicionales---su sinceridad de sentimiento, la refinada gracia de sus figuras, la atención a los detalles en las vestimentas y de trasfondo arquitectónico (v. arquitectura), así como su fascinante franqueza en la ejecución. En todas estas cualidades, Mateo tiene su parte, sin embargo es más distinguido por la dignidad de sus figuras femeninas, la graciosa presencia de los ángeles y la armonía de un esquema de color rico y brillante a la misma vez. Por estas razones los críticos lo declaran el mejor pintor sienés del Siglo XV. El primer trabajo auténtico de Mateo data de 1470: una Virgen entronizada, con ángeles, pintada para los servitas, la cual se halla en la Academia de Siena. En 1487 realizó para el altar mayor de Santa María de Servi del Borgo---la iglesia servita de su aldea nativa--- una “Asunción”, con los Apóstoles y otros santos como espectadores; en la predela pintó la historia de la Santísima Virgen. Según G. Milanesi (en su edición de Vasari II, Florencia, 1878, p. 493, nota 3) la parte principal de esta pintura aún puede verse en la iglesia, mientras que las porciones laterales fueron trasladadas a la sacristía. Algunas de sus otras Madonas merecen mención particular: una en el Palacio Tolomeo en Siena, la Virgen con el Niño Jesús pintados, en 1484 para el palacio de la ciudad de Siena, sobre una pilastra en el salón decorado por Spinello Aretino; en el domo de Pienza, la Virgen y el Niño entronizados entre San Mateo y Santa Catalina, San Bartolomé y San Lucas. En la luneta, Mateo pinto la Flagelación, y sobre la predela, tres medallones---“Ecce Homo”, la Virgen y un Evangelista. La rúbrica indica: "Opus Mathei Johannis de Senis". Como decoración en el pavimento de la Catedral de Siena, diseñó tres sujetos: la “Sibila de Samos”, el “rescate de Betulia”, y la “Masacre de los Inocentes”. En 1477 pintó su “Madonna de la Nieve” (Nuestra Señora de las Nieves) para la iglesia bajo dicha advocación en Siena. Al compararla con la Madonna servita de 1470, se ve que sobrepasa al trabajo anterior en la belleza de los tipos, la simetría de las proporciones, y en los tonos de los colores. La Santa Bárbara, una composición hecha para la Iglesia de Santo Domingo en Siena, es también un trabajo sobresaliente: dos ángeles le colocan una corona sobre la cabeza a la santa, mientras que otros, acompañados por Santa María Magdalena y Santa Catalina de Alejandría y tocando instrumentos, la rodean. Cuando Mateo trata temas que involucran acción animada, pierde bastante de su poder artístico. Las escenas incidentales están combinadas de una manera confusa, la expresión de sentimiento es forzada y degenera en mueca; el resultado final es afectado y caricaturesco.

Fuente: Sortais, Gaston. "Matteo da Sienna." The Catholic Encyclopedia. Vol. 10. New York: Robert Appleton Company, 1911. Transcrito por Joseph P. Thomas, En Memoria de Mrs. Joe G. Nolan Traducido al español por Giovanni E. Reyes. Revisado y corregido por Luz María Hernández Medina