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Jueves, 28 de marzo de 2024

El Duque de La Rochefoucauld-Liancourt

De Enciclopedia Católica

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(Francisco-Alejandro-Federico)

Nació en La Roche-Guyón, el 11 de enero de 1741; murió en París, el 27 de marzo de 1827. Se opuso durante los últimos años al reino de Luis XV, al gobierno de Maupeou, fue amigo de los reformadores que rodearon a Luis XVI y tuvo influencia entre estos economistas a favor del rey. Tuvo poca atracción a la carrera militar y se dedicó más bien a trabajos de agricultura científica. Durante el último período del viejo régimen, La Rochefoucauld hizo de sus propiedades rurale sen Liancourt, una estación experimental; esperaba con ello mejorar tanto el suelo como al campesinado.

Introdujo nuevos métodos de labranza, fundó la primera escuela técnica en Francia (la que estaba destinada a los niños de los soldados pobres) y comenzó con dos fábricas. Políticamente fue partidario del régimen democrático el cual estaba encabezado por el rey, y toda la vida fue fiel a este sueño. Como suplente de la nobleza en Clermont en Beauvaisis, se dedicó sin titubeos a la “reunión de los tres órdenes”. Fue él quien en la noche siguiente a la toma de la Bastilla (14 de julio de 1789) despertó a Luis XVI, diciendo: “No es una revuelta, es una revolución”.

Presidió la Asamblea Constitucional del 20 de julio al 3 de agosto de 1789. En la noche del 4 de agosto, fue de los más entusiastas en votar a favor de la abolición de los títulos de la nobleza y de los privilegios de la misma. Como gran maestro, acompañó a Luis XVI de Versalles a París el 5 y 6 de octubre de 1789. Como presidente del comité de la mendicidad, realizó un esfuerzo supremo en la Asamblea Constituyente a fin de organizar la asistencia pública.

Determinó la extensión, y los límites respecto a los derechos de cada ciudadano en cuanto a la asistencia, determinación de obligaciones hacia el Estado, y estableció un presupuesto estatal para acción social, el cual tuvo un monto de cinco millones y medio de francos, y el que implicó la confiscación nacional de las propiedades del hospital, de organizaciones de caridad, y el ingreso de fundaciones privadas.

Liancourt es uno de los más evidentes representantes de la tendencia que dirigió el estado revolucionario en destruir todas las formas colectivas de caridad. Se dedicó a la persona de Luis XVI y a las doctrinas de la Revolución; en 1792 se preparó desde Normandía y Picardy, para la lucha del rey en territorios tan lejanos como Rouen.

Sin embargo, Luis XVI rechazó la idea de colocarse en las manos de los diputados. La Rochefoucauld emigró luego del 10 de agosto, y residió en Inglaterra hasta 1794, y después en Estados Unidos (1794-7). Mientras estuvo residiendo en este último país, escribió ocho volúmenes para inducir a Washington a interferir a favor de Lafayette, y donde también expuso las ideas que sobre educación y agricultura, trató de aplicar en Francia. Después del 18 Brumario, Napoleón le autorizó a retornar a sus propiedades en Liancourt, las que le fueron restauradas.

Fue nombrado durante el Primer Imperio (1806) como inspector general de la “Ecole des Arts e Métiers” en Chalons, de la cual, la escuela de Liancourt había sido pionera. El libro “Prisons of Philadelphie” el que compuso en Estados Unidos y fue publicado en 1796, tuvo la intención de iniciar reformas en los sistemas penitenciarios. En Francia, durante la restauración, en 1814, él pidió en reiteradas ocasiones, ser nombrado inspector de prisiones. En 1819 llegó a ser inspector de uno de las veintiocho divisiones en las cuales se dividían las penitenciarias. Luis XVIII no le dio de nuevo los ribetes azules, y él se sentó con la oposición.

La Rochefoucauld fue para la Revolución Francesa, una figura similar a la de Franklin en Estados Unidos. Fue un aristócrata de nacimiento, y un liberal en su perspectiva de vida; estuvo en contacto con los representantes del nuevo comercio, mantuvo su presencia como líder en las causas de beneficio a la gente, en pro de mejorar las condiciones de vida, de salud, sanitarias, en hospitales. Fundó asilos, reorganizó las escuelas de conformidad con las teorías de Lancaster, cuyo libro llegó a traducir (Systéme Anglais D´Instruction).

Puso en práctica métodos de instrucción mutua, y los estudiantes, entre 1816 y 1820, incrementaron su número entre 165,000 a 1,123,000. En 1818 estableció el primer banco de ahorros, como institución en París. El 19 de noviembre de 1821, fundó la Sociedad de Moral Cristiana, la que presidió hasta 1825. Fue visto mucho veces con carácter de sospechoso, por parte de la policía de la Restauración.

En sus reuniones, se encontraban hombres tales como Charles de Rémusat, Charles Coquerel, Guizot el pedagogo, Oberlin, y Llorente, historiador de la Inquisición. También, Broglie, Guizot, y Benjamin Constant así como Dufaure, Tocqueville, y Lamartine. Ellos compartían en las reuniones con discursos y presentaciones. Se discutía sobre temas de asistencia social, de caridad, sobre loterías, esclavitud; se combatió el juego de casino, y sobre esto se estableció pena de prisión.

Cuando La Rochefoucauld murió, la Restauración no permitió a los estudiantes de Chalons llevar su ataúd, y se tomaron medidas extremas. Nuestro personaje fue un típico filantropista, con todo lo que ello implicó en cuanto a generosas intensiones e innovaciones prácticas. No obstante, también, con cierta actitud de ingenuidad, heredó de la filosofía del Siglo XVIII, la observancia de no confiar demasiado en las acciones de caridad de la Iglesia. Olvidó también que la Iglesia, la entidad más representativa del espíritu de hermandad, está llamada por nuestra moderna sociedad, a establecer la victoria del espíritu en términos prácticos, como sólo ella puede hacerlo.

FERDINAND-DREYFUS, Un philanthrope d'autrefois: La Rochefoucauld-Liancourt, 1747-1827 (Paris, 1903).

GEORGE GOYAU Transcripción de Beth Ste-Marie Traducción al castellano de Giovanni E. Reyes