https://ec.aciprensa.com/newwiki/index.php?title=Demiurgo&feed=atom&action=historyDemiurgo - Historial de revisiones2024-03-28T13:11:24ZHistorial de revisiones para esta página en el wikiMediaWiki 1.24.1https://ec.aciprensa.com/newwiki/index.php?title=Demiurgo&diff=10728&oldid=prevLuz María Hernández Medina: Página creada con 'La palabra significa literalmente un trabajador público, ''demioergós'', ''demiourgós'', y fue usada originalmente para designar a cualquier artesano que ejercía su oficio o…'2009-11-24T08:34:45Z<p>Página creada con 'La palabra significa literalmente un trabajador público, ''demioergós'', ''demiourgós'', y fue usada originalmente para designar a cualquier artesano que ejercía su oficio o…'</p>
<p><b>Página nueva</b></p><div>La palabra significa literalmente un trabajador público, ''demioergós'', ''demiourgós'', y fue usada originalmente para designar a cualquier artesano que ejercía su oficio o comercio para el uso del público. Sin embargo, pronto se comenzó a usar ''technítes'' y otras palabras para designar al artesano común, mientras que demiurgo se separó para el Gran Artífice o Fabricador, el Arquitecto del [[universo]]. Al principio se añadieron las palabras ''toû kósmou'' para distinguir al gran Hacedor de los demás, pero gradualmente ''demiourgós'' se convirtió en el término técnico para el Hacedor del [[cielo]] y la tierra. En este sentido lo usó frecuentemente [[Platón y platonismo|Platón]] en su “Timæus”. Aunque a menudo fue usado libremente por los [[Padres de la Iglesia|Padres]] y otros para indicar al Creador, la palabra nunca se usó estrictamente para denotar “al que produce a partir de la nada” (para esto los griegos usaron ''ktístes''), pero sólo “uno que forja, forma y modela”. El creador en el sentido de la [[teología dogmática|teología]] [[cristianismo|cristiana]] no tiene lugar en la [[filosofía]] [[paganismo|pagana]], la cual siempre presupone la [[esencia y existencia|existencia]] de la materia. Además, según la filosofía griega el creador no es necesariamente idéntico con [[Dios]], como fuente primera y suprema de todas las cosas; puede ser distinto de e inferior al espíritu supremo, aunque puede ser también la expresión práctica de la [[razón]] de Dios, [[el Logos]] como operativo en la [[armonía]] del universo. <br />
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En este sentido, es decir, aquel de un hacedor distinto al Dios Supremo, ''Demiurge'' se convirtió en un término común en el [[gnosticismo]]. Sin embargo, los gnósticos no estaban satisfechos con meramente enfatizar la distinción entre el dios supremo, o dios padre, y el demiurgo, sino que en muchos de sus sistemas concebían la relación del demiurgo con el dios supremo como una de real antagonismo, y el demiurgo se convertía en la personificación del poder del [[mal]], el [[Satanás]] del gnosticismo, con quien los fieles tenían que librar la [[guerra]] hasta el final para poder complacer al Dios bueno. Entonces el demiurgo gnóstico asume una similitud asombrosa al [[Ahrimán y Ormuz|Ahrimán]], el destructor malo de [[Ahrimán y Ormuz|Ormuz]] en la filosofía mazdeísta El [[carácter]] del demiurgo gnóstico se volvió más complicado cuando en algunos sistemas se le identificó con [[Yahveh]], el Dios de los [[judaísmo|judíos]] del [[Antiguo Testamento]], y fue puesto en oposición a [[Jesucristo|Cristo]] en el [[Nuevo Testamento]], el Hijo Unigénito del Dios supremo y bueno. El propósito de la venida de Cristo como salvador y redentor fue rescatarnos del poder del demiurgo, el señor del mundo de la oscuridad, y traernos a la luz del Dios bueno, su Padre en los cielos. El último desarrollo en el carácter del demiurgo fue debido a que originalmente se consideraba a Yahveh como el que dio la [[Ley de Moisés|Ley]] en el [[Monte Sinaí]], y de ahí como el originador de toda restricción a la [[voluntad]] [[hombre|humana]]. Como el demiurgo era esencialmente malo, toda su obra también lo era; en consecuencia toda [[ley]] era intrínsecamente mala y el [[deber]] de los hijos del dios bueno era transgredir esa ley y pisotear sus [[precepto]]s. Esto llevó a las más salvajes orgías del [[gnosticismo]] [[antinomianismo|antinomiano]]. <br />
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Según [[Valentino y valentinianos|Valentino]] el demiurgo era el vástago de la unión de Achamoth (''he káta sophía'' o sabiduría inferior) con la materia. Y como Achamoth misma era sólo la hija de ''Sophía'', la última de los treinta [[eones]], el demiurgo estaba distante por muchas emanaciones del Propator, o dios supremo. Al crear este mundo a partir del caos, el demiurgo fue inconscientemente influenciado para siempre por Jesús Soter; y el universo, para sorpresa incluso de su Creador, se volvió casi perfecto. El demiurgo deploró incluso su más leve imperfección, y como él se creía el dios supremo, intentó remediar esto enviando al Mesías. Sin embargo, dicho [[Mesías]] se unió realmente a [[Jesucristo|Jesús]] el [[salvación|Salvador]], quien [[redención|redimió]] a los [[hombre]]s. Estos son ''hulikoí'' o ''pneumatikoí''. El primero, u hombre carnal, regresará a la tosquedad de la [[materia]] y finalmente será consumido por el fuego; el segundo, u hombre psíquico, junto con el demiurgo como su maestro, entrará en un estado intermedio, ni [[cielo]] (''pleroma''), ni [[infierno]] (''hyle''); los hombres puramente espirituales será liberados completamente de la influencia del demiurgo y junto con el Salvador y Acamoth, su esposa, entrarán el ''pleroma'' desposeídos del cuerpo (''húle'') y [[alma]] (''psuché''). En esta forma más común de gnosticismo el demiurgo tenía una función inferior aunque no intrínsecamente mala en el universo como cabeza del mundo psíquico. <br />
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Según [[marcionitas|Marción]], el demiurgo se debía distinguir claramente del dios bueno; el primero era ''díkaios'', severamente justo, el último ''agathós'', o bondad infinita; el primero era el dios de los [[judaísmo|judíos]], el último el [[verdad]]ero [[Dios]] de los [[cristianismo|cristianos]]. Cristo, aunque en realidad es el [[Hijo de Dios|Hijo del Dios]] bueno, pretendía ser el [[Mesías]] del demiurgo, lo mejor para difundir la verdad respecto a su Padre celestial. El verdadero [[creencia|creyente]] en Cristo entraba al [[Reino de Dios]], el no creyente permanecía para siempre como [[esclavitud y cristianismo|esclavo]] del demiurgo. En esta forma de gnosticismo, el demiurgo ya había asumido un aspecto más maligno. Según los naasenos el Dios de los judíos no es meramente ''dikaios'', sino que es el gran tirano Jaldabaoth, o hijo del caos. Él es el demiurgo y hacedor del hombre, pero como un rayo de luz entra desde arriba al cuerpo del hombre y le da un alma; Jaldabaoth está lleno de [[envidia]]; trata de limitar el [[conocimiento]] del hombre prohibiéndole la fruta del conocimiento en el [[Paraíso terrenal]]. El demiurgo, temiendo que Jesús, a quien había tratado como su Mesías, pudiera difundir el conocimiento del dios supremo, mandó a los judíos a crucificarlo. <br />
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En la consumación de todas las cosas toda la luz volverá al pleroma; pero Jaldabaoth, el demiurgo, con el mundo material será arrojado a las profundidades. Algunos de los ofitas o naasenos [[dulía|veneraban]] a todos los réprobos del Antiguo Testamento, tales como [[Caín]], o la gente de [[Sodoma]], como valientes resistentes al demiurgo. En estos sistemas fantásticos la [[idea]] del creador fue degradada al máximo. Entre los gnósticos, sin embargo, quienes por regla ponían diferencia entre el demiurgo y el dios supremo, había una excepción; pues según los [[ebionitas]], cuyas opiniones nos han llegado a través la literatura pseudo-clementina, no hay diferencia entre el Dios Supremo y el demiurgo. Son idénticos, y el dios que hizo el cielo y la tierra es digno de la [[adoración]] por parte del hombre. Por otro lado, el sistema gnóstico está coloreado de [[panteísmo]], y su demiurgo no es un creador sino sólo un constructor del mundo. (Vea [[gnosticismo]], [[Valentino y valentinianos]]; [[marcionitas]].)<br />
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'''Fuente''': Arendzen, John. "Demiurge." The Catholic Encyclopedia. Vol. 4. New York: Robert Appleton Company, 1908. <http://www.newadvent.org/cathen/04707b.htm>.<br />
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Traducido por Luz María Hernández Medina</div>Luz María Hernández Medina